Si bien el rol de la mujer avanzó progresivamente en el sector energético nacional, tanto en el ámbito privado como público, aún hay mucho trabajo por hacer, ya que uno de cada diez puestos de los tomadores de decisión en empresas de generación eléctrica, son mujeres.
En el marco del Día Internacional de la Mujer, Energía Estratégica conversó con Cecilia Giralt, cofundadora y miembro de la comisión directiva de la Asociación de Mujeres en Energías Sustentables (AMES), para conocer cómo evoluciona este tema en el país, las oportunidades existentes y las barreras que aún restan afrontar.
“Las mujeres tienen una mayor participación en empresas pequeñas y medianas en energías renovables y vemos que cada vez hay más fuerza de cambio en este sentido. Somos las mujeres las que estamos traccionando esta transición energética. Incluso, hay un rol participativo muy activo, principalmente en el hidrógeno verde, lo cual es un dato positivo y esperanzador porque hay mucha masa de una generación joven que tiene otro grado de conciencia, de importancia y de trabajo técnico, en el rol que la energía limpia tiene que tener para descarbonizar las matrices productivas y energéticas a nivel global” manifestó Giralt.
“En la medida que haya más mujeres en cargos directivos o con poder de decisión, como es el caso de la secretaria de Energía de la Nación, Flavia Royón, habrá más oportunidades genuinas para romper los paradigmas y estereotipos que nos han llevado a que hoy tengamos que conversar sobre esta brecha”, agregó.
Esto se ve reflejado en el último informe del Banco Interamericano de Desarrollo, titulado “Género y Energía en Argentina: La participación de las mujeres en el sector de generación eléctrica”, elaborado en colaboración con AMES,en el cual se mostró que la participación más equitativa en el subsector de generación de energía tiende a aumentar la eficiencia de las empresas.
Asimismo el informe reflejó que a nivel mundial, la tasa de participación de las mujeres en energía renovable es en promedio alrededor del 32%, aunque a nivel regional, se observó que en las empresas de servicios de electricidad, gas y agua de la Argentina en el año 2019 fue de un 17%, estando por debajo del promedio de América Latina y el Caribe (21%).
Estos datos demuestran que todavía existen barreras para lograr más equidad en términos de género. Quizás una de las más importantes son las culturales, convocando a la sociedad toda a trabajar en cambios de paradigmas y estereotipos , principalmente en la formación temprana y en los niveles de los colegios secundarios. Esto ayudará a que más jóvenes puedan elegir y acceder a a carreras STEM.
“Falta mucho camino para recorrer, pero en cuanto el velo se corra y la cultura se abra hacia esa diversidad, se ocuparán más puestos por parte de mujeres en niveles de decisión.Las mujeres aportamos mucho en la toma de decisiones, sobre todo cuando tenemos que resolver problemas complejos, ya que somos muy creativas y nuestra mirada a esos problemas es circular, no lineallo cual nos da la posibilidad de implementar soluciones alternativas que muchas veces no suelen ser pensadas en los ámbitos formales”, aseguró la cofundadora de AMES.
“Para ir achicando esta brecha, sería positivo que las empresas tambien implementen planes de acción y políticas integrales en los cuidados del hogar no remunerados, tanto para hombres y mujeres. Estoayudaría a sentar las bases formales del cambio cultural que comentamos, ya que las tareas de cuidado en el hogar y la familia serían equitativas, El permitir que el papá pueda tener mayor participación en el cuidado de sus hijos y compartir con ellos actividades escolares es un cambió importante que tenemos que empezar a generar en la sociedad, lo cual nos va a permitir comenzar a diluir paulatinamente esas barreras.”, continuó.
Las iniciativas de AMES
Como aliadas WEPs (Women Empowerment Principles) de ONU Mujeres, AMES adhiere a los 7 principios de empoderamiento de la mujer.
La Asociación, fundada en 2019, busca trabajar en la comunidad tratando de potenciar las capacidades de las personas, sin distinción de género, por lo que en el año 2022, lanzó la propuesta “Comunidad Ames”, un espacio de trabajo voluntario y organizado que convoca a hombres y mujeres alineados con la misión de AMES. El espacio está organizado en distintas mesas de trabajo, cuyo objetivo es avanzar en acciones y proyectos concretos que generen impacto en la sociedad,
“Las mesas que tenemos activas hasta el momento son: Evaluación de Políticas y Programas de Género aplicados a la Energía, Observatorio de Género, Proyectos técnicos y de Innovación y Espacios de Capacitación y Sensibilización. La idea es trabajar en proyectos concretos y en alianzas con otros actores, para lograr un impacto que ayude en este cambio cultural“, explicó Giralt.
“Asimismo estamos articulando un programa de pasantías en colaboración con empresas privadas del sector, para acercar más jóvenes a la experiencia laboral temprana. Pensamos que eso es el semillero para la inserción laboral de más mujeres”, agregó.
“Ojalá que dentro de muy poco tiempo, hayamos superado esta brecha, y nuestras conversaciones estén centradas en el talento humano y cómo desarrollar mejor su potencial”, concluyó.