Según un informe presentado por la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (Cecha), “3 de cada 5 estaciones de servicios corren serios riesgos de cerrar y más del 85 por ciento no podrán sostenerse en el mediano plazo si la situación no mejora”.

Al respecto, recordaron que “las estaciones fueron excluidas a partir de este mes del programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP)”, lo que motivó un reclamo del sector a principios de mes.

El presidente de la entidad, Gabriel Bornoroni, afirmó en rueda de prensa (virtual) que “aún con el horizonte sanitario un poco más despejado, la pandemia está muy lejos de terminar para varios sectores de la economía. En especial para las estaciones de servicio por la caída abrupta de la circulación”.

Desde Cecha vienen alertando respecto a lo que definen como ‘nueva normalidad’, donde la circulación restringida o limitada hizo que sus ventas queden estancadas en valores un 32.9% más bajos que previos a la pandemia.

 Según un informe elaborado junto a la consultora Economic Trends, una estación necesita vender 292.000 litros de combustible al mes para poder alcanzar el ‘punto crítico’, es decir, aquel umbral con el que llegan a pagar los costos operativos. Hoy, el 67,1% de las estaciones del país no lo superan. Trabajan directamente a pérdida, afirmaron.

Esta situación, reiteró Bornoroni, “se viene extendiendo desde el comienzo de la pandemia, por lo que muchos estacioneros decidieron sacar créditos, usar ahorros o vender bienes para continuar funcionando, a la espera del final de la pandemia”. “Sin embargo, el paso de los meses erosionó los recursos y hoy corren serios riesgos de cerrar”.

“La quita del ATP agravó el cuadro, aseguran desde Economic Trends, ya que el Programa permitía que la cantidad de estaciones que no superan el punto crítico baje del 67 al 51 por ciento”. “Cabe señalar que el beneficio era percibido cada vez por menos estaciones por las nuevas restricciones que iba implementando el Gobierno. Del 83% de las estaciones que pudieron acceder al programa en mayo el número cayó al 65% en octubre. Ahora directamente es cero”, graficaron.

Bornoroni refirió que “fuimos declarados servicio esencial, le pusimos el pecho, hemos sacado préstamos, créditos, y vendido las joyas de la abuela y ya no tenemos resto. Hoy no podemos garantizar que lleguen todas las estaciones abiertas a 2021”.

“Sería muy triste que hayamos pasado la mayor parte de la pandemia para ahogarnos a esta altura, que dicen que falta menos para que se empiece a vacunar”, sostuvo el directivo empresario.