Las subastas de energías renovables del Programa RenovAr aún tienen contratos pendientes que abarcarían alrededor de 2000 MW en potencia instalada.

Uno de esos emprendimientos es el de Biotérmica Las Lomitas S.A., adjudicado durante RenovAr 2 en la zona central de la provincia de Formosa, más precisamente en el departamento de Patiño.

Dicho proyecto comenzó la construcción hace más de un año, pero sufrió la caída del financiamiento tras las elecciones primarias de 2019. Desde entonces está a la espera de que vuelva a haber financiamiento en Argentina para este tipo de iniciativas.

Biotérmica Las Lomitas implica una potencia de 10 MWh netos para inyectar a la red que funciona con biomasa seca y, en palabras de su directivo, Manuel Ron, “tiene un potencial de desarrollo enorme en una región donde faltan proyectos industriales o agroindustriales”.

“Un punto fuerte del proyecto es el desarrollo social por la cadena de biomasa, la cadena de proveedores, entre otras”, agregó.

Con ello se refiere a que el empleo directo contaría con cuarenta personas aproximadamente, mientras que el indirecto, en la cadena de biomasa, superaría los doscientos trabajadores.

“¿Cómo es la búsqueda de financiamiento? Hay dos factores: por un lado, la voluntad política de la Secretaría de Energía de extender los plazos de los contratos o quitar penalidades. Por el otro, algún financiamiento bancario que sea apto para este tipo de riesgo, con tasas y plazos adecuados y las garantías que sean necesarias”, aseguró Ron.

“Hace falta financiamiento, que tiene que estar, de alguna manera, direccionado por el Estado Nacional, que es quien aplica las reglas del juego”, detalló.

En cuanto a la posibilidad de subvención por parte del gobierno o del banco provincial, tal como busca acordar Chaco con el proyecto fotovoltaico de Albares S.A, aquí el directivo no lo ve con tanta claridad:

“Los montos de este proyecto no le alcanzan al Banco de Formosa. Se requiere la participación de un banco de otra escala, como el Banco Nación, el Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE), o alguno de fomento”.

Además reconoce que “actualmente no están las condiciones para poner un nuevo proyecto”, pero a la vez aclara que las renovables son la única posibilidad que tiene Argentina de disminuir las emisiones y cumplir con los compromisos frente al cambio climático.

Por lo que plantea una pregunta de cara al futuro, sobre el mejoramiento de las circunstancias macroeconómicas y desarrollo de emprendimientos: “¿Qué mejor oportunidad para el gobierno de generar empleo genuino que potenciando los proyectos que están en stand by y converger con los acuerdos firmados?”.