El futuro de las energías renovables sigue siendo incierto. Si bien la disputa con la administración actual de México proviene de los últimos dos años, el inicio de un nuevo año atrajo más dudas pese a que exista un marco regulatorio y la ley para crecer e impulsar las renovables. 

Y en las últimas semanas ya se han mencionado nuevas medidas en contra de las energías limpias, como la del Centro Nacional de Control de Energía (CENACE) de quitar de must-run a plantas renovables como la del Gobierno de revisar contratos. 

Javier Romero Durand, Gerente General de EcoValue S.A. de C.V., opinó que “el Gobierno no está respetando la ley. En México la ley es clara y deben entrar primero las energías renovables”, refiriéndose a la política de confiabilidad donde, bajo su criterio, ingresan al sistema las plantas con combustibles fósiles por encima de las renovables. 

“Están usando el marco regulatorio y, al no poder cambiar la reforma energética, están usando al órgano regulador para impedir que se aplique la ley. Aunque el gobierno lo niegue, es ciertamente claro”, agregó.  

Además está en juego aquellos contratos que ganaron la primera, segunda y tercera subasta pública, que hoy en día deberían entrar en operación. 

¿Cuál es el inconveniente? CENACE no realiza las pruebas pre-operativas para que las nuevas centrales entren; mientras que la Comisión Reguladora de Energía no entrega los permisos. 

“Hay cerca de 2 GW de proyectos ya instalados que no pueden entrar en operación”, aseguró el especialista. 

Todas estas circunstancias derivan en “falta de certeza jurídica” y de “viabilidad de nuevos proyectos”, que lleva a que empresas cesen sus inversiones en el país o pongan en stand by los proyectos a desarrollar. 

«Estamos perdiendo miles de millones en inversión, que generan puestos de trabajo, riqueza y una energía más barata. Es un ganar-ganar y ojalá lo entienda el gobierno mexicano para seguir creciendo como deberíamos”.

“El retroceso a una época pre-renovables no ayuda al país. Regresar a los años ‘70, con empresas estatales poderosas y cero competitivas, no es la opción. Necesitamos esa transición energética, pero lo tiene que entender el gobierno”, sostuvo.

Otro de los acontecimientos que afectan y afectarán al sector de las energías verdes en el país es la relación que exista, principalmente, entre el gobierno mexicano y el de Estados Unidos. 

Cabe recordar que estos dos países, junto a Canadá firmaron un tratado denominado T-MEC, sumado al Acuerdo de París, donde uno de los puntos en discusión fueron las renovables. 

Al respecto, Romero Durand afirmó la idea de respetar las inversiones que ya se han realizado, tanto nacionales como extranjeras. Y a la vez estimó que “habrá puntos de desacuerdo entre el gobierno estadounidense y el mexicano”, por lo que espera, más allá de negocios entre sí, que “el gobierno de México ceda en su postura”. 

“La realidad es que sigue creciendo el consumo, las plantas se vuelven más viejas y con el combustible más sucias, y ya comienza a ser un problema de salud y confiabilidad en la red. 

“Me encantaría que sea un buen año, pero si no hay certeza jurídica y en la inversión, estamos fuera”, sentenció el Gerente General de EcoValue.