¿Hoy las redes de distribución en Panamá están preparadas para recibir un 5% de la generación del país a partir de techos solares? 

En el 2019, según informes del Centro Nacional de Despacho (CND), se generaron  alrededor de 11.4 GW-h en el año y de estos el  2.5% fue a partir de fuentes fotovoltaicas. De esta manera, aumentar a un 5% de generación de energía en Demand-Side es una importante cantidad y depende de muchos factores.

¿Cuáles?

-Cambios en la regulación  y mayor flexibilidad tarifaria. Panamá tiene una regulación que no permite un autoconsumo realista  ni una flexible tarifa horaria para el pequeño cliente (<500kW-h al mes). Si esto no cambia, es difícil que pueda ser factible que estos clientes entren a generar.

-Integración de una medición moderna o advanced metering infrastructure (AMI). Todavía se factura manualmente. El cliente debería conocer en tiempo real su consumo. Es muy difícil integrar un software de gestión de generación y consumo sin esta información en línea. Además, sin esto, es imposible ir hacia el paradigma de las SMART GRID.

-Temas técnicos como la operación de la red de distribución en baja tensión. Este aspecto, muchas veces es descuidado. Ejemplo: Los transformadores en media tensión están diseñados para  transformar de alta a baja tensión y para onda senoidal. Si entran muchos clientes residenciales a generar, habrá una entrada masiva de equipo de electrónica de potencia (inversores) con la consecuente cambio en la calidad de la onda y un cambio en el flujo de potencia que pude dar problemas de operatividad en los transformadores (elevación de la tensión en el lado de alta sin control y saturación y calentamiento del núcleo debido a la distorsión harmónica). Y eso es uno de los tantos problemas que se enfrentarían.

– Otro tema es como controlar la oferta y demanda de tantos clientes. En este caso, temas de nuevas tecnologías como  Big Data, Blockchain e Inteligencia Artificial puede ser buenas opciones para asistir en el análisis, control, pronostico y toma de decisiones sobre este nuevo mercado. Aquí es necesario preparar recurso humano y confiar más en ese recurso humano nacional.

-El financiamiento para el pequeño cliente. Deben existir algún tipo de incentivo para dar préstamos para la compra de equipo e instalación. Aquí debe haber una colaboración ágil entre el estado y los bancos.

Afortunadamente, Panamá, está haciendo grandes esfuerzo desde varios sectores para lograr esto y que son, principalmente, liderados por la Secretaria Nacional de Energía(SNE). El SNE tienen una visión muy ordenada, estructurada y con alto conocimiento de todo el tema eléctrico y como debe ser la transición hacia las SmartGrids. Sin embargo, tenemos grandes retos que enfrentar en el lado de Demand-Side. Hay que hacer mucha docencia dirigida a los clientes residenciales y comerciales para que entiendan con claridad la necesidad de estos cambios.

¿Qué principales medidas pueden tomar las distribuidoras en el corto plazo para modernizar las redes de distribución eléctrica en Panamá? 

Las empresas distribuidoras son las que tienen el contacto directo con el cliente residencial, que en principio, seria el principal agente a incorporar como prosumer. Es claro que el comercial también lo es, dado que consume mas de un tercio de la energía generada. Sn embargo, es probable que le cueste más a los pequeños cliente residenciales, entrar en esta infraestructura. Aquí hay temas tanto económicos, como también de medición.

Hay mucho más cliente residenciales que comerciales, por lo cual se tendría que invertir más en la estructura de comunicación necesaria para la medición inteligente de este cliente

¿Quién pagará esta estructura de comunicaciones y transferencia de datos?

En Panamá, las redes de distribución son concesiones que el Estado mantiene con empresas privadas  y al final son un servicio público.

En mi opinión, creo que se debe compartir la inversión en la modernización de esta estructura. Las distribuidoras se beneficiaran, ya que tendrán mayor control sobre el sistema de facturación y tendrán una generación local que permite tener energía disponible para otros cliente. Por otro lado, además del evidente tema económico para los clientes que generen, también, podrán gozar de mayor robustez en la calidad de la energía. Cuando haya apagones o distorsiones en la red, el cliente se podrá aislar.

Ing. Carlos Allan Boya Lara, investigador Académico

¿Cuáles estudios serían necesarios que impulse el Gobierno para dar certeza sobre el estado de las redes y el camino posible por seguir? 

Este tema es muy importante, y aquí debe la academia con las empresas de generación, transmisión, distribución, privadas y del gobierno trabajar en conjunto. Un paso importante es evaluar que tan enérgicamente eficientes somos a todos los niveles.  Ejemplo: en el país hay una gran cantidad de centros escolares que todavía utilizan iluminación muy ineficiente. Cambiar a luces LED puede ahorra hasta un 70% de energía, lo que puede resultar en millones de dólares en ahorro. Pero es necesario un estudio e inventario y una posterior inversión.

También, estudiar el tema de cómo estamos construyendo nuestras casas, edificios, etc. Si no se construye con un pensamiento sostenible y eficiente energéticamente, de nada sirve que se integre masivamente las fuentes no convencionales.

Por otro lado, está el tema de los vehículos eléctricos. Faltan estudios nacionales sobre el efecto de su entrada masiva a las redes eléctricas: ¿Están preparadas?

Hay que hacer estudios sobre el tema del almacenamiento de energía. Como se puede desarrollar para que dé estabilidad y apoyo a las generación no despachable y sin potencia firme como la eólica y la fotovoltaica. Ejemplo: el almacenamiento por bombeo hidráulico es una buena alternativa para Panamá, pero debe estudiarse.

También, el tema de los ciudadanos que no tienen acceso a la energía eléctrica por alguna razón técnica o económica (viven en islas o en regiones muy separada del último punto de red). No se pueden olvidar y tenemos que estudiar alternativas para ellos.

Puedo adelantar que estamos haciendo un estudio sobre el desarrollo de  software y hardware de gestión automática inteligente y de control para la generación y consumo de pequeños clientes. Esto permitirá, que dada una tarifa, perfil de consumo y necesidades de estos clientes, se puedan  ahorrar y vender energía de manera eficiente.

En resumen, es importante invertir en Investigación y desarrollo (I+D) en estos puntos y todas las tecnologías que nos ayuden a disminuir la huella de carbón.

¿En cuánto tiempo podría Panamá ejecutar las acciones necesarias para introducir smart grids?

En mi opinión, nos hemos tardado mucho en modernizar nuestra red, sin embargo, actualmente se están dando los pasos apropiados.

Ya suena mucho en las redes sociales y el ciudadano común, temas relacionados como el vehículo eléctrico, las energías renovables no convencionales y el apoyo a medidas que disminuyan nuestra huella de carbón.

Hay que hacer mas docencia, ya que el apoyo popular es clave en la transición en las cual el país esta embarcado. El tema de cuándo seamos Smart Grid, dependerá de la voluntad de todos los sectores.

Hay que hacer grandes inversiones, tanto en estructura como en recurso humano, también, mucha docencia y I+D.

Mi pronóstico es que si Panamá le pone voluntad, en 10 años deben haber cambios notables en la red y quizás hasta un tercio de consumo proveniente de fuentes renovables no convencionales en puntos de máximo consumo.  Esperamos…