La demanda de energía eléctrica en el mes de enero último resultó 0,3 % menor que la del mismo  período del año anterior pese a registrarse temperaturas superiores .  El consumo cayó fuertemente en las actividades comerciales, indicó el informe periódico de la Fundación Fundelec.

Al considerarla por tipo de usuario, si bien la demanda total termina con un decrecimiento marginal, tanto la demanda residencial , y principalmente la industrial  (atada a la actividad económica), presentaron crecimientos respecto al año 2020 del orden de 1,5%.

En cuanto a la gran demanda, no solo se observa un aumento comparado con el mismo mes del año pasado, sino que también  presenta un recupero de los consumos mes a mes, especialmente desde el comienzo de la fase Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio.

LOS DATOS DE ENERO 2021

 En enero de 2021, la demanda neta total del MEM fue de 11.927,1 GWh  mientras que, en el mismo mes de 2019, había sido de 11.964,2 GWh . Por lo tanto, la comparación interanual evidencia un descenso de -0,3%.  Asimismo, se dió un crecimiento intermensual que llegó al 5,3%, respecto de diciembre de 2020, cuando la demanda fue de 10.330,1 GWh.

En enero 2021 se registró un nuevo record de potencia máxima, alcanzando los 26.450 MW, superando el record histórico de febrero 2018 de 26.320 MW.  La demanda residencial representó el  48% de la total del país y, además, tuvo un crecimiento de 1,9% respecto al mismo mes del año anterior.

En tanto, la demanda comercial sufrió una fuerte caída del 6,4%, siendo el 27% del consumo total de energía eléctrica.  Y la demanda industrial representa el 25% del  total,  con un crecimiento en el mes del 1,2% aproximadamente.

Luego de disponerse el aislamiento social preventivo y obligatorio (ASPO) desde el 20 de marzo, la gran demanda presentó una caída promedio del 24%.

 A medida que se fueron flexibilizando actividades y, sobretodo, desde el Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio (DISPO) en noviembre, se observó un aumento de la gran demanda, alcanzando en diciembre, prácticamente la misma que el año anterior, mientras que en enero se superaron algunos de los registros del año 2020, en el contexto previo a la pandemia.

La demanda eléctrica registra en los últimos doce meses (incluido enero de 2021) 7 meses de baja (abril de 2020, -11,5%; mayo, -7,6%; agosto, -6,4%; septiembre, – 1,7%; octubre, -3,5%; noviembre , -4,2%; y enero de 2021, -0,3%) y  5 meses de suba (febrero de 2020, 1,3%; marzo, 9,3%; junio de 2020, 0,9%; julio, 1,2%; y diciembre, 1,5%).

 TEMPERATURA

 Tanto en enero de 2021 como en enero de 2020 las temperaturas medias se ubicaron por arriba de los valores esperados.  La temperatura media de enero último fue de 25.5 °C, mientras que en el mismo mes del año anterior fue 25.1 °C, y la histórica del mes es de 24.5 °C.

 En cuanto al consumo por provincia, en enero, 20 fueron las provincias y empresas que marcaron descensos:  Santa Cruz (-10%),  Tucumán (-8%),  Mendoza, Neuquén y  San Juan (-7%),  Chubut,  Córdoba,  Formosa,  Santiago del Estero,  San Luis y EDEA (-6%), Corrientes (-5%), La Pampa, Catamarca  y La Rioja (-4%),  Jujuy (-3%), Salta y Río Negro (-2%),  Misiones y  EDES (-1%).  En tanto, 7 provincias y empresas presentaron ascensos: EDEN (6%), Chaco (5%), EDELAP (5%), Santa Fe (3%) y Entre Ríos (1%). En el área metropolitana de Buenos Aires la demanda  tuvo una suba promedio de 2,1%.

En lo que respecta al detalle de las distribuidoras de Capital y GBA, que demandaron un 32% del consumo total del país y totalizaron el referido ascenso conjunto de 2,1%,  los registros de CAMMESA indican que EDENOR tuvo un crecimiento de 3,6%, mientras que en el área de EDESUR la demanda ascendió  0,2%. En el resto del MEM existió una caída de 2,7%.

DATOS DE GENERACIÓN

Si bien la demanda local presentó una caída, la generación local fue mayor al mes de enero de 2020 siendo 12.897 GWh  contra 12.433 GWh  del mismo período del año anterior.

 La generación hidráulica y térmica son las principales fuentes utilizadas para satisfacer los requerimientos de electricidad, aunque se destaca el crecimiento en la participación de las energías renovables.  La generación hidráulica se ubicó en 2.145 GWh  en enero de 2021 contra 3.024 GWh  del mismo período del año anterior, producto principalmente por los bajos caudales. Si hablamos de los aportes hidráulicos para las principales centrales del MEM, continuando con la tendencia observada el año pasado,  siguen siendo menores a los caudales históricos.

En lo que respecta a los combustibles para generar, al igual que en los últimos meses, gran parte del uso de combustibles alternativos está asociados a la operación de exportación, siendo el gas natural el principal combustible utilizado a la hora de producir energía local.

En enero 2021 siguió liderando ampliamente la generación térmica con un aporte de producción equivalente al  66,80% de los requerimientos.  Por otra parte, las centrales hidroeléctricas aportaron el  16,60 % de la oferta, las nucleares proveyeron el  5,25%, y las generadoras de fuentes alternativas  11,16% del total. La importación de electricidad representó el 0,19% de la oferta total .

 DATOS ESPECÍFICOS DE LA PANDEMIA (20-03 AL 25-02)

 Según informa CAMMESA, la demanda de comercios y servicios (principalmente supermercados y otros centros comerciales), desde el 20 de marzo del 2020 hasta el 25 de febrero último tuvo caídas considerables pero las tres primeras semanas de febrero presentaron, por primera vez, una suba leve de 0,3% comparado con la última semana previa a la cuarentena.

 Aunque en la industria a nivel global para el mismo período  la caída de la demanda es de 8,8%, desde marzo hasta junio de 2020 se dió una baja cercana al 50%, que luego logró remontarse.

El consumo industrial es el que explica la variación en la gran demanda que, en general, fue aumentando en todas las ramas. En enero último se destacó el repunte de consumo en industrias vinculadas a la alimentación, el comercio y los servicios, como también la extracción de petróleo y minerales.

Además, las principales recuperaciones se observan en las actividades relacionadas con productos metálicos no automotor, empresas de la construcción, madera y papel, la industria textil y la automotriz.