El informe hecho por Iniciativa Climática de México menciona que, en caso de aprobarse la reforma, se espera un incremento en las emisiones de SO2 de tres veces las cantidades actuales. Además, en materia de renovables, se pondría en riesgo la instalación de 5.7 GW eólicos y 2.8 GW de energía solar fotovoltaica.
Y, siguiendo esta misma línea, se plantea que “la participación de las energías limpias proyectada para 2024 sería tan sólo del 21.7%”, lejos del 35% que se estipula en Ley de Transición Energética para el año mencionado.
Víctor Ramírez, vocero en Plataforma México Clima y Energía y consultor independiente del sector energético, brindó una entrevista para Energía Estratégica y amplió la visión de lo propuesto por ICM: “Esto significaría un incremento de hasta un 40% de las emisiones de gases de efecto invernadero en la actividad de generación eléctrica”.
¿Por qué? La “Ley Combustóleo”, tal como la llama el especialista, pretende modificar el despacho eléctrico y, antes que las centrales solares o eólicas, prioriza “energía generada por otras plantas de la Comisión Federal de Electricidad, tales como la nuclear, geotérmica, ciclos combinados y las termoeléctricas”, según lo escrito en iniciativa presentada por el Ejecutivo Federal.
“Hay una promesa de refinar más toda la gasolina que se consume en el país, y eso trae como consecuencia automática tener más combustóleo y una forma de deshacerse de él es la operación constante de las plantas termoeléctricas”, explicó Ramírez.
Y si bien las modificaciones a la LIE fueron aprobadas por ambas Cámaras Legislativas, se presentaron varios recursos jurídicos que, momentáneamente, frenaron su implementación.
Sin embargo, la decisión por parte de la Suprema Corte de Justicia de la Nación aún no llegó y el consultor independiente del sector energético reconoció que “no se sabe cuánto tiempo puede tardar”.
“Esto puede llevar tres meses, como también seis, incluso los juicios de amparo a veces tardan ese lapso. Pero depende mucho del ánimo que tenga el Poder Judicial y, al estar en el proceso electoral, no le veo fin, al menos, antes que termine dicho el mismo”.
“Lo que sí espero es que la SCJN declare la reforma como inconstitucional y se regrese al orden constitucional. De no ser así, muchas empresas irían a tribunales internacionales y ahí es donde México tiene todas las oportunidades de perder”, opinó Víctor Ramírez.
Ante la pregunta de si es posible que el Poder Ejecutivo trate de hacer constitucional la “Ley Combustóleo”, el entrevistado respondió afirmativamente, pero para ello debe tener la aprobación de dos terceras partes de los legisladores presentes en ambas Cámaras del Congreso de la Unión.
“Esta reforma pasó 68 votos a favor contra 58 en contra en el Senado, lo cual sugiere que el Presidente de la República no tiene los votos necesarios en ambas Cámaras para poder implementar una reforma constitucional”, aclaró.
No obstante, desde el sector se comenta que no habrá cambios, al menos a corto o mediano plazo, y el vocero en Plataforma México Clima y Energía no es ajeno a ello: “Ojalá me equivoque, pero no veo cambios, excepto que la oposición llegue a ganar la mayoría de la Cámara en las elecciones federativas del 6 de junio».
“Y que, mediante una negociación muy efectiva, obligue al presidente a retomar los instrumentos legales que tiene, como las subastas y Certificados de Energías Limpias, para permitir la agregación de nuevas centrales de generación”, agregó.
¿Existe alguna otra alternativa? Desde la óptica de Ramírez sí, aunque le parece “más lamentable”, y es que se negocie caso por caso con el director de CFE. “Esto abriría una puerta de discrecionalidad que no es muy buena para ningún país, menos para uno que quiere salir del subdesarrollo”, concluyó.