Siemens Energy, junto con varias empresas internacionales, posee el proyecto piloto Haru Oni de Highly Innovative Fuels (HIF), el cual ser la primera planta integrada y comercial a gran escala del mundo para la producción de eCombustibles en base a hidrógeno verde.

La misma se ubica en la región de Magallanes, al extremo sur de Chile y se trata de una central con una turbina eólica de 3,4 MW y una línea de transmisión de respaldo de 13 kV. 

La planta se emplazará en una superficie cercana a 3,7 hectáreas, dentro del predio Tehuel Aike en Punta Arenas, mientras que el proyecto ocupará en total 5,7 hectáreas. En tanto, se estima que la construcción demorará once meses y su vida útil será de veinticinco años.

Andreas Eisfelder, director de Nuevas Energías en Latinoamérica de Siemens Energy, afirmó durante un webinar que en la próxima fase de dicho proyecto utilizarán agua de mar para producir hidrógeno verde, para el cual Andes Mining & Energy trabaja en su desarrollo. 

“La desalinizararemos y eso, en impacto del costo, tiempo y tecnología, no representa ningún reto mayor”, sostuvo. 

“Se recomienda la desalinización del agua de mar o fuentes de agua industrial que puedan ser tratadas o disponibilidad de aguas que no generen impacto en la sociedad ni en otros consumidores de agua”, agregó. 

Además, Eisfelder reconoció que no le parece “para nada inviable o prohibitivo pensar en la integración de agua de mar en el uso de la producción de hidrógeno verde”, proceso que se ha debatido en el sector por su posible costo económico. 

El proceso

El piloto obtendrá hidrógeno verde del agua con energía eólica, luego se combina con CO2 capturado de la atmósfera y mediante proceso de síntesis se producirá metanol. A partir de ello, se obtendrá gasolina carbono neutral que se podrá utilizar en vehículos convencionales sin modificación alguna.

“El próximo paso de síntesis de metanol a gasolina verde. Es un combustible químicamente idéntico con la gasolina fósil que conocemos, pero producida en base de viento y agua”, declaró el especialista.

Se espera producir 350 toneladas al año de metanol crudo y 130.000 litros de gasolina al año. Ambos combustibles serán almacenados en estanques y transportados en camiones hacia Puerto Mardones, a unos 35 kilómetros del proyecto para su exportación.

En tanto se proyecta que se produzcan 16 toneladas anuales de gas licuado carbono neutral a partir de 2022. Y en su fase de construcción, el proyecto generará trabajo para 150 personas promedio.

Por otra parte, director de Nuevas Energías en Latinoamérica de Siemens Energy, manifestó que este mecanismo que implementarán en Chile “también podría estar disponible para México”, país en las que reiteradas oportunidades se señaló su potencial para producir hidrógeno a partir de fuentes renovables.