En el marco de la Ley de Net Billing, N°21.118, el Gobierno de Chile autoriza a que clientes regulados, sean residenciales, industriales o comerciales, puedan autogenerar su propia energía eléctrica mediante fuentes de energías renovables, proceso conocido como Generación Distribuida.
En ese marco, agosto marcó un record de instalaciones en lo que va del año. Según el último reporte mensual que publicó la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC), durante ese mes hubo 309 instalaciones, sobrepasando ampliamente a las 217 registradas en abril pasado.
Un dato saliente es que, de enero a agosto, el número de conexiones ya superó al 2020: 1.631 contra las 1.541; pero en términos de potencia el año pasado sigue llevando la delantera.
De acuerdo al reporte, durante todo el 2020 se instalaron 31.479 kW de Generación Distribuida. De enero a agosto de este 2021, el número asciende a 21.792 kW, es decir un 45% menos de potencia. Restará ver si durante este año se logra superar el record que se alcanzó la temporada anterior.
Más potencia
Cabe señalar que la actividad de la Generación Distribuida se potenció con la aplicación de la Ley 21.118, en noviembre del 2018. La normativa permitió triplicar el límite de capacidad en las conexiones, pasando de 100 a 300 kW.
Pero ahora desde diferentes entidades gremiales, como la Asociación Chilena de Energía Solar (Acesol) están solicitando una serie de medidas que permitan potenciar aún más la actividad.
Una de ellas es que el Gobierno permita incorporar a los clientes libres (desde 500 kW) al Net Billing, que hasta el momento no está permitido.
Señalan que un cliente pequeño, de 600 kW, 1 MW o 1,5 MW, no puede contar con una planta de autoconsumo; sino sólo de Pequeños Medios de Generación Distribuida (PMGD), que son proyectos de hasta 9 MW. Una dimensión que no resulta conveniente para este tipo de usuarios.