Las importaciones de gas de Brasil debieran mantenerse en niveles elevados en 2022, dijo a BNamericas el presidente ejecutivo de la consultora Gas Energy, Rivaldo Moreira Neto.
“Los lineamientos para la operación del sistema eléctrico no indican una reducción de la generación a gas, al menos por el momento. Si bien en el margen podría ocurrir alguna reducción, no esperamos que sea significativa en el 1S de este año”, señaló el experto.
Sin embargo, Neto plantea que si el gasoducto Rota 3 entra en operación en junio o julio, “podremos notar una menor necesidad de importaciones por parte de Petrobras, ya que la disponibilidad interna de gas en su cartera será mayor”.
Brasil importó aproximadamente 12 millones de toneladas (Mt) de gas en 2021, casi el doble de los 6,2Mt del año anterior, según datos del Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior (MDIC) compilados por BNamericas.
Las compras, que incluyen GNL, totalizaron unos US$4.700 millones, 300% más que en 2020.
Alrededor de US$3.300 millones correspondieron a cargamentos enviados desde EE.UU., el equivalente a un 2.300% más, mientras que US$1.200 millones se pagaron por gas boliviano (+18,5%). Este último es el único país que tiene una conexión por gasoducto con Brasil, conocida como Gasbol.
Los costos de importación restantes consideran cargamentos enviados desde Trinidad y Tobago (US$146 millones), Angola (US$45,6 millones), Holanda (US$41 millones), Reino Unido (US$31,4 millones) y Argentina (US$869.000).
El miércoles, la petrolera estatal Petrobras señaló que en 2021 registró importaciones récord de GNL con la compra de unos 23 millones de metros cúbicos diarios (Mm3/d) o 8.400Mm3, alrededor de 6Mt, durante el año.
La marca fue casi 200% mayor que el promedio de 7,5Mm3/d de 2020. Previamente, el año con mayores volúmenes de importación de GNL había sido 2014, con 20Mm3/d.
El principal factor de este auge de importaciones de gas en Brasil fue el aumento de la generación eléctrica a gas por causa de la crisis hídrica, ya que se buscaba preservar los deprimidos embalses hidroeléctricos del país.
Actualmente hay cuatro terminales de regasificación de GNL operando en Brasil. Una pertenece a Petrobras y está en la Bahía de Guanabara (en la foto), en el estado de Río de Janeiro.
Las demás son propiedad de Excelerate Energy en Bahía, recientemente arrendada a Petrobras, y de Celse y Gás Natural Açu, respectivamente en Sergipe y Río de Janeiro.
Petrobras también tiene una terminal de GNL en el puerto de Pecém, estado de Ceará, pero actualmente no se encuentra en operación. La empresa está llevando a cabo un proceso público para permitir que terceros accedan a ella.
Mientras tanto, hay en marcha varios proyectos para la construcción de nuevas terminales de GNL, como se detalla aquí.
Fuente:https://www.bnamericas.com/es/noticias/niveles-de-importacion-de-gas-de-brasil-debieran-seguir-elevados-en-2022