En inicios del 2023 tendrá lugar la primera subasta que impulse el desarrollo de la eólica marina según el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
Para referentes de los diferentes sectores que eligen esta tecnología para alcanzar el 42% de energías renovables hacia 2030 que exige el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC).
Aunque sostienen que la transición debe ser ordenada y a largo plazo, la soberanía energética y el avance en el mercado internacional de otros países preocupa a los inversionistas españoles.
“Francia, Escocia, Alemania y Portugal ya están por la segunda subasta y nosotros estamos por los papeles”, sostuvo Beatriz Mato, Directora de Desarrollo Corporativo y Sostenibilidad de Greenalia, durante la Mesa redonda de Energías Renovables, organizada por El Español: La Galicia que viene.
Asimismo destacó que, particularmente aquí, se cuenta con el conocimiento, los puertos, la comunidad con más kilómetros de costa y el empuje de los promotores, y se pregunta: ¿por qué esperar si hay necesidad de acelerar al máximo?
Fue durante el evento del periódico que los integrantes de las compañías de renovables coincidieron en que el potencial que tiene esta región para aportar a la cadena de suministro de la eólica marina mantendría al país como líder en el mundo.
“Desde el primer tornillo hasta el último lo podríamos hacer en España, incluso en Galicia”, afirmó Mato.
Greenalia, Cobra, Ocean Winds, Blue Float, Iberdrola, Naturgy, Repsol, incluso referentes del panorama internacional como Equinor u Orsted, quieren instalar eólica marina en las costas españolas.
Por su parte, Javier Monfort, Country manager de BlueFloat Energy en España se pregunta si llegarán a tiempo y revela un cierto temor de que, por impulsar la cadena de valor para el abastecimiento nacional, se pierdan de otros mercados.
“En paralelo al marco normativo y el desarrollo de los parques comerciales, no sería una mala opción tener un marco para un proyecto de mostrador y estar listos a la proyección internacional”, agrega Monfort.
Como prueba de que existe demanda, muchos exponen la necesidad de reemplazar la capacidad fósil en los sectores industriales.
De acuerdo a las empresas, los proyectos eólicos marinos cumplirán un papel fundamental en este sentido porque permitirá el acceso a aguas profundas para obtener una energía más predecible y con un perfil de generación que se adecúa a la exigencia industrial gracias a su carga base.