Esta semana, el Gobernador Pedro Pierluisi planteó al Congreso y Gobierno Federal una serie de medidas que urge implementar en Puerto Rico tras el paso del huracán Fiona. Entre ellas, se numera en segundo lugar al “Financiamiento para la resiliencia y sistemas solares en techos”.

En detalle, se solicita que, “a medida que haya fondos disponibles para reparar la red de energía de Puerto Rico, el Congreso debe proporcionar fondos específicos para instalaciones solares distribuidas en los techos, así como soluciones de energía solar para apoyar el tratamiento de agua y las estaciones de bombeo”.

Ahora bien, para llevar a cabo esta y otras medidas se advierte que requerirían que se «aumente significativamente» los fondos destinados para Puerto Rico.

Y, al respecto, se propone que “una posible opción es brindar recursos al Fideicomiso de Energía Verde de Puerto Rico, que fue creado en 2019, con el objetivo de apoyar financieramente proyectos que brinden acceso a energía verde a residentes de comunidades de bajos y medianos recursos, así como promover el fortalecimiento de la cultura del ahorro y uso eficiente de la energía”.

La misiva enviada esta semana a Nancy Pelosi, presidente de la Cámara de Representantes Federal, y a los senadores Charles Schumer, Kevin McCarthy y Mitch McConnell, se suma a otros pedidos de más fondos que legisladores locales, asociaciones civiles y empresarias, grupos multisectoriales y ONGs han realizado en el último tiempo.

Tal es el caso de la solicitud que Javier Aponte Dalmau, presidente de la Comisión de Proyectos Estratégicos y Energía del Senado, elevó también esta semana al Gobernador Pierluisi para que pida la intervención del presidente Joe Biden y el Congreso para que se le exija a la administradora de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés), Deanne Criswell, que “libere las restricciones y se flexibilicen los procesos altamente burocráticos que la administración Trump impuso arbitrariamente para que Puerto Rico recibiera el desembolso de fondos y que, han retrasado en gran medida, la transformación de nuestra red eléctrica”.

“Aquí el gran responsable de que no se haya hecho casi nada es FEMA. Cinco años después de la catástrofe del Huracán María es evidente que su burocracia ha retrasado significativamente los esfuerzos de reconstrucción de nuestra red eléctrica y ha contribuido a las violaciones de los derechos de nuestros ciudadanos”, acusó.

Y concluyó: “Confío en que exista verdadera voluntad para atender con prioridad, como lo espera nuestra ciudadanía, este importante reto que tenemos por delante. En la medida en que trabajemos unidos y en consenso seremos más efectivos y lograremos la transformación energética que todos aspiramos”.