El presidente francés, Emmanuel Macron, defenderá la energía nuclear en la cumbre europea de esta semana para que, en nombre del principio de la neutralidad tecnológica, la UE reconozca su importancia para alcanzar los objetivos climáticos internacionales.
Francia tiene 56 reactores en funcionamientos, dos más que China, que generan el 70% de la electricidad del país y busca extender su vida útil hasta 60 años, 20 más de lo que se estiman en la actualidad y construir seis nuevos de tecnología EPR que deberían entrar en servicio antes de 2050.

El Parlamento Europeo aprobó a principios de julio de 2022 la inclusión de la nuclear y el gas natural en el paquete de las “energías verdes”, y lo hizo con un propósito: allanar el camino del Viejo Continente hacia la eliminación total de las emisiones de CO2 en 2050.

En nombre de la llamada neutralidad tecnológica, Francia considera que no se puede discriminar la energía nuclear puesto que cada país es libre de decidir su política energética, siempre que se ajuste a los objetivos de la UE para alcanzar la neutralidad en carbono .Con ese objetivo, este martes la Asamblea Nacional adoptó por una amplia mayoría un proyecto de ley para la aceleración de los procedimientos para esos dos pilares de la estrategia nuclear.