A tres años del comienzo de la construcción de la central hidroeléctrica Aña Cuá, en Yacyretá, las obras “continúan dentro del cronograma previsto, a pesar de los obstáculos que se generaron por la pandemia”, y registran un grado de avance del 30 por ciento del proyecto integral, informó la EBY.
Alrededor de 1.500 trabajadores de Argentina y Paraguay aportan su esfuerzo y conocimiento en la ejecución de los trabajos de la nueva central, que se emplaza en el vertedero Aña Cuá de Yacyretá.
La nueva usina aprovechará el caudal ecológico de 1.500 m3/s de ese vertedero para generar más energía limpia y renovable, sin producir nuevas superficies inundadas ni relocalizar familias.
Una vez finalizadas las obras Aña Cuá aportará 270 MW de potencia instalada
permitiendo incrementar en aproximadamente un 10 % la generación del Complejo
Hidroeléctrico Yacyretá.
Se han removido miles de toneladas de tierra y rocas para el emplazamiento de la nueva Central. Miles de metros cúbicos de hormigón armado van dando forma a la futura casa de máquinas y las instalaciones indispensables para su funcionamiento.
Ya se han recibido en la zona de obra muchos de los componentes electromecánicos que serán instalados para permitir el funcionamiento de las tres turbinas tipo Kaplan que se emplazarán en la central.
Las obras estan integradas por la embocadura y el canal aductor a la central, la casa de máquinas, el canal de fuga y una playa de maniobras e interconexión, con las correspondientes líneas de transmisión hacia Argentina y Paraguay.
La Central contará, además, con una nueva instalación para la transferencia de peces que permitirá la migración de especies desde el curso del Brazo Aña Cuá hacia el embalse Yacyretá continuando al alto Paraná.
Las obras son ejecutadas por el Consorcio Aña Cuá ART integrado por las empresas Astaldi, Rovella Carranza y Tecnoedil, bajo la supervisión de la Gerencia de Obras de Añá Cuá de la Entidad Binacional Yacyretá y las consultoras de inspección.