La energía solar fotovoltaica flotante (FPV) es un concepto que poco a poco toma mayor lugar a lo largo del mundo y cada vez más actores utilizan porciones de las masas de agua de su superficie para ubicar sistemas renovables conectados a la red, a tal punto que hoy en día alcanza los 3 GW de capacidad instalada.
Ante esa tendencia, el Instituto Fraunhofer Chile analizó el potencial y viabilidad de esta tecnología para la transición energética y la protección de recursos hídricos de la evaporación en el país trasandino.
“Chile será el único país de Latinoamérica con estrés hídrico extremadamente alto al año 2040, sumado a que el país debe agregar otros 30 GW de energía renovable en una década”, contextualizó David Jung, Ingeniero de Investigación de Conceptos PV Integrativos en Fraunhofer Chile.
“Bajo este panorama, encontramos más de 30000 superficies de agua que acumulan 13961 km2. La mayoría de esas son de carácter natural, por lo que excluyendolas, esa superficie se disminuye a sólo 342 km2. Y si consideramos una densidad flotante FV de 1,2 MW/ha, nos da un potencial de 16568 MW de capacidad a lo largo del país, principalmente en la zona central, entre Coquimbo y Biobío”, explicó durante un webinar.
Ese potencial para la generación de energía fotovoltaica flotante significaría poco más de 27000 GWh por año, es decir, aproximadamente un 33% de la producción eléctrica a nivel nacional en la actualidad. Mientras que a su vez, podría proteger alrededor de 163 millones de metros cúbicos al año de la evaporación (39% de uso de agua potable doméstico).
Cabe recordar que, a medida que bajan los precios de los sistemas fotovoltaicos y mejora la fiabilidad, aumenta la presión para encontrar lugares adecuados para los sistemas centralizados conectados a la red, especialmente en las zonas en que el uso de la tierra es una restricción crítica, y la FPV ofrece una alternativa atractiva a los sistemas terrestres.
¿Qué segmentos podrían ser más viables? El estudio del Instituto Fraunhofer Chile determinó que la mayoría del potencial se encuentra en el segmento de net-billing, es decir, en la generación distribuida, debido a las masas de agua pequeñas existentes en el país. Y allí el costo por MWh rondaría entre los USD 70 y USD 80 en aquellas zonas con mejor factor de carga.
Aunque no descartó que también hay potencial para los Pequeños Medios de Generación Distribuida (PMGD) y proyectos de utility scale, “mediante centrales más grandes y un LCOE más bajo”.
“Pero para ello se debe encontrar los mecanismos para aplicar esos proyectos ya que resultan más caros que los que se hacen en tierra”, aclaró David Jung.
La entrada Fraunhofer Chile proyecta que el país tiene un potencial de 16 GW para la fotovoltaica flotante se publicó primero en Energía Estratégica.