Por Santiago Magrone
. La petrolera de mayoría accionaria estatal YPF informó que “toda comunicación emitida por la Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos –CEPH–, no incorpora la posición de YPF, salvo que expresamente así lo indique”.
En un comunicado, la Compañía explicó que “La presente decisión surge de una deliberación con los asociados y directivos de la Cámara (integrada por las principales operadoras de la industria local de los hidrocarburos), en la que YPF, atento a su conformación accionaria, expresó que se abstiene de participar en las comunicaciones externas”.
“YPF continúa participando en la Comisión Directiva y trabajando activamente en las Comisiones de la CEPH aportando a la construcción de la agenda sectorial y de su cadena para el crecimiento y desarrollo de la Argentina”, señaló.
Pero el comunicado de la petrolera que ahora preside Horacio Marín, hizo hincapié en que “YPF mantendrá la modalidad expresada precedentemente al incorporarse a las distintas Cámaras del sector energético, como la Cámara Argentina de la Energía –CADE–” entidad que por estos días preside el economista (ex ministro) Miguel Peirano.
En rigor, YPF impulsó en 2019 la creación de la CADE, con un papel relevante en dicha cámara. Decidió retirarse como miembro en 2020, y ahora esta pegando la vuelta.
La CADE destaca en su web que está “formada por ejecutivos de empresas líderes en energía, busca representar a todos los actores del sector, equilibrando la representación”.
“Inicialmente enfocada en hidrocarburos, especialmente petróleo y gas de Vaca Muerta, CADE abarca la cadena completa, desde exploración hasta distribución. Con empresas como Colhué Huapi, ExxonMobil, CGC, entre otras, pretende ser un canal representativo para consensos a mediano y largo plazo, impulsando el desarrollo energético con nuevas formas de producción”, añade.
“CADE es una voz unificada que destaca la importancia de estas empresas para el futuro del país. Su objetivo es promover el crecimiento del sector para proveer energía abundante y accesible, cambiar de importador a exportador neto de energía, y generar condiciones propicias para inversiones y oportunidades de exportación”, se puntualiza.
Cabe referir que en oportunidad de aquella salida de YPF en 2020, la CADE reafirmó que seguiría “trabajando hacia la búsqueda de los consensos básicos de mediano y largo plazo para el desarrollo del potencial energético del país”, en base a su “vocación de incluir a todos los actores, independientemente del tamaño o la trayectoria de cada uno, entendiendo la importancia del equilibrio de representación entre sus miembros”.
Desde la CADE insistieron en ése momento en señalar que “desde su inicio, la cámara ha tenido una mirada amplia y se ha propuesto invitar a todos a participar. Tal es así que hoy, a más de un año de su creación, CADE está integrada por 15 empresas socias y es liderada por el máximo nivel ejecutivo de las compañías con presencia en la cadena energética”.
Entre las principales asociadas de la entidad, que por aquel entonces presidía el economista (y ex Secretario) Carlos Magariños, se cuentan Pan American Energy, Total, Chevron Argentina, CGC, Exxon Móbil Argentina, Shell, Sinopec, Pluspetrol, Pampa Energía, Raízen, y Trafigura.
En setiembre de 2019 la CADE presentó un Recurso de Amparo contra el decreto de congelamiento de los precios del crudo y de los combustibles que dispuso la Administración Macri poco después de su derrota en las PASO, modificando así su política sectorial en un intento de recuperar terreno en la campaña electoral. Tal recurso legal de la Cámara empresaria fue desestimado.
La CADE tuvo a YPF entre sus principales impulsoras durante la gestión del ex presidente de la compañía Miguel Gutierrez, nuclea entonces a empresas de hidrocarburos que operan en el Upstream y el Downstream –productoras, proveedoras de servicios petroleros, refinadoras – con proyección a otros rubros de la industria energética.
“Hacia adelante, la Cámara buscará articular el diálogo con YPF con el objetivo de hacer contribuciones constructivas en materia de políticas públicas que fomenten el progreso de todos los argentinos”, se indicó.
La decisión de salida por parte de YPF en 2020 fue comunicada por su entonces CEO, Sergio Affronti, pocos días después de una reunión de la entidad a la que incluso asistió el entonces presidente de la petrolera, Guillermo Nielsen, que se realizó luego de conocerse la decisión del gobierno (Alberto Fernandez) de reactivar el esquema del “barril criollo” para las operaciones en el mercado local.
En el ámbito petrolero se consignó en aquella oportunidad como posible motivo de la salida de YPF una suerte de cambio de rol por parte de la petrolera 51 % estatal (desde 2012) en el mercado interno de la industria hidrocarburífera.
En la gestión Gutierrez, que concluyó poco después del cambio de gobierno en el país, se concibió a YPF como una petrolera que debía desempeñarse en el mercado de manera similar al de las empresas del sector privado en esta industria. Tal criterio parece estar siendo ratificado ahora.