• El Gobierno nacional debió suspender este miércoles el suministro de gas a algunas industrias, estaciones de GNC y centrales termoeléctricas debido a problemas de abastecimiento por fallas en la red de distribución y demoras en la compra de gas importado.
  • El pico de producción de gas en la Argentina ocurrió en 2004. Luego, se produjo un declive que se revirtió a partir de 2015. Las importaciones se redujeron en la última década, y el GNL cobró mayor importancia que el gas comprado a Bolivia.
  • Más del 60% del gas distribuido en el país es destinado a las centrales eléctricas y la industria. El consumo residencial explicó el 24% del total consumido el año pasado.

El Gobierno nacional debió suspender este miércoles el suministro de gas a algunas industrias, estaciones de GNC y centrales termoeléctricas debido a problemas de abastecimiento por fallas en la red de distribución y demoras en la compra de gas importado.

Según informó el Ministerio de Economía, la suspensión del servicio para la demanda considerada “no prioritaria” obedeció a resguardar el abastecimiento para servicios esenciales como comercios, escuelas, hospitales y hogares. No obstante, el Gobierno señaló que la totalidad del abastecimiento se regularizará “a lo largo del día”.

En esta nota te contamos por qué se suspendió el suministro a algunos sectores, cuánto gas se produce en nuestro país, cuánto se importa y cómo se distribuye el consumo de gas en la Argentina.

 

¿Por qué se suspendió el suministro de gas?

Según informó el Gobierno nacional, la suspensión parcial del suministro de gas se debió principalmente a 3 factores: problemas en el transporte de gas dentro de la Argentina, inconvenientes administrativos que demoraron la importación de un cargamento de gas natural licuado (GNL) desde Brasil y las bajas temperaturas, que consideró “excepcional” para el mes de mayo.

En cuanto a los problemas de distribución, señaló que “hubo fallas en las plantas compresoras de San Luis y Córdoba, lo que provocó la reducción de la provisión de gas”.

Además, el Gobierno nacional alegó un “contratiempo administrativo” que impidió que un barco de la empresa estatal brasileña Petrobras descargara en el puerto de Escobar un cargamento de GNL (un tipo de gas que se transporta en estado líquido y luego se regasifica para introducir al sistema).

Según indicó la empresa estatal Energía Argentina (ENARSA), el buque se encontraba en el puerto desde el martes por la tarde, pero no inició el proceso de descarga debido a “una disconformidad del proveedor respecto a la carta de crédito, a pesar de que la misma fue emitida en los términos requeridos por el proveedor”.

Finalmente, el Gobierno indicó que se registró un aumento de la demanda debido a “las excepcionales condiciones meteorológicas del mes de mayo”, y reconoció que también existieron “demoras en las obras de infraestructura programadas por la administración anterior”.

Al respecto, Santiago Urbiztondo, economista Jefe de la Fundación FIEL y especialista en temas energéticos, señaló a Chequeado que si bien la construcción del gasoducto Néstor Kirchner aumentó en un 10% el volumen de gas transportado, quedaron pendientes obras que permitirían ampliar aún más su capacidad.

La producción de gas en el país

Como se explica en esta nota, la producción de gas en nuestro país creció casi de forma continua hasta alcanzar su pico histórico en 2004, cuando se produjeron más de 52 mil millones de metros cúbicos. Sin embargo, tras ese pico, la producción nacional de gas se redujo y en 2014 tocó su piso más bajo en más de 20 años.

 

 

A partir de 2015, la producción volvió a aumentar y, salvo caídas puntuales registradas principalmente en 2020 y 2021 (años en los que la actividad estuvo fuertemente afectada por las restricciones impuestas por la pandemia del coronavirus), continúa creciendo. En 2023, la producción total alcanzó los 48,1 mil millones de metros cúbicos.

¿Cuánto gas importa la Argentina?

Urbiztondo explicó a Chequeado que “la producción doméstica de gas alcanza y sobra para el consumo habitual, excepto en el invierno, cuando la estacionalidad del consumo es muy grande”.

El especialista señaló que la producción local de gas “alcanzaría para atender la demanda, sobre todo con los nuevos recursos de Vaca Muerta, pero falta infraestructura de transporte”. Ante este escenario nuestro país se ve obligado a importar gas en invierno.

Históricamente la Argentina importaba gas desde Bolivia, pero Urbiztondo indicó que “la capacidad de producción de gas de Bolivia se fue reduciendo”, por lo que comenzó a utilizarse como alternativa “la importación de barcos de gas licuado que se regasifican en los puertos de Bahía Blanca y de Escobar”.

 

 

De acuerdo con los datos oficiales, la importación de gas se redujo un 57% en los últimos 10 años. En 2023, además, cobró mayor importancia el peso del GNL sobre el total importado: el 52,9% provino de barcos regasificadores, mientras que el restante 47,1% fue importado desde Bolivia. En 2020, en tanto, la importación desde el país vecino había explicado el 74,5% del total.

¿Qué sectores consumen más gas?

De acuerdo con datos oficiales, más del 60% del gas que se distribuye en el país es consumido por las centrales eléctricas y la industria. 

En 2023 (último dato disponible), las centrales eléctricas consumieron 13,1 mil millones de metros cúbicos (el 32,1% del total). En tanto, a la industria se destinaron 12,8 mil millones de metros cúbicos de gas (el 31,5% del total).

 

Les siguieron el consumo residencial (al que se le destinó 9,8 mil millones de metros cúbicos, el 24,1% del total) y el GNC (utilizado como una alternativa a la nafta), que consumió 2,2 mil millones (5,5%). Completan la distribución del gas natural los comercios (3,4%); los subdistribuidores de gas (2,2%) y los entes oficiales (1,2%).

 

 

 

Fuente: https://chequeado.com/el-explicador/crisis-del-gas-3-datos-sobre-la-produccion-importacion-y-consumo-en-la-argentina/