Compañía General de Combustibles (CGC), brazo energético de Corporación América, se consolidó en los últimos años como uno de los principales productores de hidrocarburos del país. Tras quedarse con los activos de Petrobras en Santa Cruz a mediados de la década pasada, primero incrementó su producción de gas en la cuenca Austral. Y luego, tras la adquisición de los yacimientos de la china Sinopec, en junio de 2021, la empresa se posicionó como uno de los mayores productores de Cañadón Seco, un crudo pesado cada vez más solicitado por las refinerías para blendear el petróleo liviano que se extrae en Vaca Muerta. CGC también posee una participación accionaria en varias compañías que operan activos de midstream y transporte de gas natural. En esa lista figuran, por ejemplo, GasAndes, una empresa clave para apuntalar el crecimiento de las exportaciones de gas hacia Chile; Transportadora de Gas del Norte (TGN) y TGM, que opera un gasoducto hasta Uruguaiana, en la frontera con Brasil.

La distribución de esos activos de infraestructura se expande, sin embargo, en territorios diferentes a donde se encuentran emplazados los campos de producción de hidrocarburos de CGC. Si, desde la óptica de una petrolera, la participación en compañías de midstream es estratégica para sumarle valor al upstream, es decir, a la extracción de petróleo y gas, ese desacople natural juega en contra de la visión de largo plazo de la compañía que preside Hugo Eurnekian.

TGN apunta a aprovechar la expansión del mercado de gas a partir de la reversión del Gasoducto Norte.

Es por eso que, para corregir esa situación, CGC estaría evaluando la posibilidad de desprenderse de su participación accionaria en Transportadora Gas del Norte (TGN), una de las dos transportistas de gas que operan en la Argentina, según indicaron a EconoJournal fuentes del mercado.

La empresa, que está en la instancia de contratación de un banco que estará a cargo del proceso, posee un 50% de Gasinvest, la sociedad controlante de TGN, que explica un 56% del capital accionario de la transportista. La otra mitad de Gasinvest está en manos de Tecpetrol, brazo petrolero del Grupo Techint, que a su vez tiene la potestad de designar al director general de TGN por un acuerdo de accionistas. Daniel Ridelener, uno de los directivos de mayor trayectoria en la industria del gas, ocupa desde hace años esa posición.

A su vez, un 24% de las acciones de TGN le pertenecen a la firma Southern Cone Energy Holding y el 20% restante flota en la Bolsa porteña.

Racional

La decisión de CGC de testear el interés del mercado en adquirir su participación en el mercado hace sentido con el plan estratégico de la empresa, que ubica entre sus pilares al deriskeo del potencial no convencional de Palermo Aike, una formación de roca madre de hidrocarburos de la cuenca Austral, donde la empresa perforó y está completando un pozo de petróleo junto con YPF; así como también al aprovechamiento de otras oportunidades en el upstream, en especial en Vaca Muerta; y a la inversión en proyectos de integración gasífera con Chile (la compañía tiene en carpeta un ambicioso proyecto para exportar Gas Natural Licuado argentino a través de una de las terminales existentes en ese país).

Aún es temprano para saber quiénes podrías ser los interesados en quedarse con la participación de CGC en TGN. Tecpetrol está prácticamente descartado, porque el artículo 34 de la Ley del Gas prohíbe que un productor tomé el control exclusivo de una empresa regulada de gas natural (la excepción es Metrogas, que es controlada por YPF desde que se materializó la salida forzada de British Gas). Habrá que ver cuál es el interés de Southern Cone Energy Holding, una firma prácticamente sin visibilidad institucional ni referente empresarial que desembarcó en TGN en 2014 tras la salida del fondo Blue Ridge Investments.

, Nicolas Gandini