El presidente y CEO de YPF, Horacio Marín, consideró que “en el mediano plazo, el autodespacho (de combustibles en las estaciones de servicio habilitado por el gobierno) debería ser más barato que el despacho tradicional, como ocurrió en Estados Unidos. Es lo lógico de esperar, porque reduce costos operativos para la estación”, agregó.

Al respecto, Marin refirió que “nosotros ya teníamos una estación en Luján de Cuyo con autodespacho, la llamamos Smart o Inteligente. La experiencia nos muestra que este modelo puede funcionar en Argentina, pero lleva tiempo que los usuarios se adapten”.

El presidente de la energética de mayoría accionaria estatal y de mayor participación en el mercado local de combustibles sostuvo que “Vamos a ir acompañando el proceso, porque todavía el usuario necesita acostumbrarse. En Estados Unidos pasó lo mismo, fue un proceso progresivo donde la gente se fue familiarizando con el sistema”, señaló en declaraciones periodísticas.

“En cuanto al GNC, no va a haber nunca autodespacho porque es un tema de seguridad. La manipulación d.e gas requiere protocolos específicos que no pueden ser responsabilidad del usuario”, sostuvo Marín, relativizando así los riesgos del autodespacho de naftas y gasoils.

En otro orden, y respecto de la exportación de GNL y la competencia internacional en este rubro, Marín sostuvo que “el 2025 es el año clave para las ventas. Nuestra competencia es Estados Unidos, así que hay que cerrar los contratos lo antes posible para hacerlo una realidad. Y vamos muy bien”.

Al respecto describió aspectos de su reciente gira por varios países de Asia en procura de la apertura de mercados.

“Fuimos a Japón, Corea, China e India para abrir mercados. En Japón hablamos de exportar 7 millones de toneladas; en Corea, 3 millones; en China, entre 6 y 7 millones. En India firmamos un MOU con tres compañías para la compra de GNL. El contrato con India puede ser de 5.000 millones de dólares por año. Llevado a 20 años, hablamos de 100.000 millones en exportaciones para YPF, otras compañías y la Argentina”.

Vaca Muerta como motor económico

Acerca de la producción de hidrocarburos en reservorios no convencionales, Marín describió que “Vaca Muerta (NQN) es el segundo campo argentino. Vamos por muy buen camino. El programa económico ayuda muchísimo y abrió el mundo hacia nuestro producto, tanto el petróleo como el gas. Para el petróleo, el mercado es spot: se licita constantemente y gana el mejor postor. Para el gas, se requieren inversiones muy grandes y compromisos de largo plazo”.

Respecto de la factibilidad del proyecto de producción de GNL, el directivo destacó que “si tomamos la mitad de las reservas que EE.UU. estima para Vaca Muerta (308 TCF), nos quedan 75 TCF para exportar tras cubrir la demanda local hasta 2050. Este proyecto (encabezado por YPF) usa 35 TCF, por lo que es seguro”.

Acerca del mercado regional para el GNL, y en particular Brasil, Marín sostuvo que “Brasil tiene una dificultad: si llueve, no compra; si no llueve, compra”, en alusión a la capacidad de menor o mayor producción de energía hidroeléctrica . “Es un mercado pseudo spot, por eso el desarrollo de Vaca Muerta no puede depender solo de la región” señaló.