El probable tránsito de un mercado de costos auditados, actualmente vigente, a uno de ofertas, es un tema que el Coordinador Eléctrico Nacional volvió a poner sobre la mesa a raíz de su llamado a una licitación internacional para contar con un estudio para el diseño de un mercado mayorista de energía en base a ofertas. Si bien Chile fue pionero en los años ochenta con la apertura de los mercados hacia la competencia, ha frenado ese impulso precursor y con ello se ha masificado el constante juicio de la industria respecto a que la regulación no está actualizada según los retos y exigencias de nuestro sistema eléctrico que ha mutado desde uno hidrotérmico a otro con un alto componente de energías renovables.

Esta crítica tampoco estuvo ajena en el webinar organizado por ACEN denominado “Los desafíos de transitar hacia un mercado marginalista de ofertas”, oportunidad en que los panelistas coincidieron además en que la transición hacia un mercado de ofertas surge como una necesidad en el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) frente a los desafíos que significan valorizar adecuadamente las energías renovables o aquellas que se almacenan.

Según Matías Negrete-Pincetic, director del Departamento de Ingeniería Eléctrica de la UC, éste sería un cambio de relevancia que involucraría un vuelco radical en cómo se ha operado el sistema durante décadas. “Un esquema de mercado basado en ofertas ciertamente facilita la integración de nuevas tecnologías y entrega una mayor posibilidad de gestionar sus propios riesgos a los agentes. Su implementación requiere ponderar los beneficios y riesgos, un diseño adecuado y, lo más importante, una correcta ejecución con expectativas claras de plazos y recursos asociados”. 

En su presentación, Negrete-Pincetic propone una transición basada en 3 etapas en que destacó “que la operación en tiempo real no esté basada en el uso de la lista de orden de mérito, sino que sea con el uso de mecanismos de despacho más automatizados, que es algo en que el Coordinador está trabajando. Un aumento de la granularidad de los precios. Ojalá tener tanto para la energía como para los sistemas complementarios bloques de 1 hora y no estos bloques de varias horas que tenemos en la actualidad. Que el cálculo mismo del costo marginal emerja de modelos y no de medidas heurísticas que se aplican a esta lista de mérito”.

El diseño de este probable mercado de ofertas requiere de cambios en la regulación, para que ésta no se transforme en un verdadero cuello de botella, continuó el profesor de la UC. Los estudios prevén que las 3 etapas podrían implementarse en alrededor de 4 años, siempre y cuando ya esté resuelto el tema regulatorio. 

Por su parte, Andrea Kuster, Legal Counsel en Grenergy Renovables, mencionó “que se pueda obtener la información en forma descentralizada, como en un mercado de ofertas, puede ser una ventaja frente a un escenario donde se observa que es más costoso y complejo poder auditar los costos. Un mercado estructurado en ofertas, si está correctamente implementado, podría llevar a que los participantes trabajen por una eficiencia en sus costos para poder presentar las mejores ofertas”.

En la práctica, bajo el esquema de costos auditados, señaló Iván Rudnick, director de Nuevos Negocios en Systep, que “el que tiene que auditar, el Coordinador, tiene que tratar de descubrir cuál es el costo real de las empresas y eso en un escenario donde hay miles de unidades, hay nuevas tecnologías, es casi imposible. Por otro lado, en el mercado de ofertas deberían generarse las condiciones para que no haya abuso de posición de poder de mercado. El gran desafío que vemos en los dos esquemas es que los distintos actores presenten sus costos reales de producción”.

Al respecto, Rudnick señaló que, si se logra que los costos reales se reflejen en este mercado mayorista, “se dan las señales adecuadas para que nuevos actores entren, se logre más eficiencia y eso en el largo plazo lleva a menores costos en el suministro, ya sea por la señal del costo marginal como también por los costos laterales, que cada vez más van aumentando”. 

Kuster aclaró que hacer el monitoreo de las barreras regulatorias que puedan existir es un punto relevante en la implementación del mercado de ofertas y, pese a que la dilación en la discusión regulatoria puede ser un obstáculo poderoso, según Negrete-Pincetic, “ya debiésemos trabajar en todas las mejoras habilitantes para un potencial cambio a una transición de ofertas y eso va a mejorar el sistema sí o sí”. 

La entrada ACEN señala que un mercado de ofertas podría materializarse en 4 años si la legislación pertinente está resuelta se publicó primero en Energía Estratégica.