En el marco de una emergencia climática sin precedentes donde diversos países luchan por reducir sus emisiones, México se encuentra sin una actualización de sus Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC) y con una regresiva apuesta por energías limpias.
La falta de compromiso del país en esta matriz se vio evidenciada durante la Mesa redonda: Energías renovables y decrecimiento energético. Allí, Andrés Flores, director de Cambio Climático y Energía en World Resources Institute (WRI), recordó: “La meta expuesta en la COP26 es poco ambiciosa: exhibió la misma en 2020 que había presentado en 2015 con el Acuerdo de París y se consideró regresiva”.
El objetivo planteado era lograr la reducción de tan solo el 22% de sus emisiones de gases de efecto invernadero y un 51% sus emisiones de carbono negro para 2030.
En esta línea, el especialista apuntó: “Se están tomando decisiones con prejuicios de años atrás, sin ver que el tiempo ha cambiado. México todavía tiene una penetración de energías renovables modernas relativamente pequeña: sólo del 31% de nuestra generación es con energía limpia. Debemos llegar a emisiones cero para mediados del siglo”.
Las ventajas de las energías verdes
Si bien Flores aclaró que México necesita llevar adelante cambios sistémicos para recuperar terreno en políticas que mitiguen el Cambio Climático, describió cuáles son las ventajas que obtendría el país de profundizar su apuesta por las energías renovables.
En este sentido, explicó que si se aplican medidas de eficiencia energética, se pueden lograr ahorros que generan una amortización de costos en tan sólo tres años.
“Se justifica invertir en la descarbonización de la economía porque tiene beneficios fáciles de contabilizar: se requieren inversiones de 100 mil millones de dólares hacia el 2030 que traerán beneficios de al menos 105 millones”, enfatizó
Además, vale recordar cuánto ha bajado el precio de las energías limpias en los últimos años. De acuerdo al IPCC AR6- WG 3, 2022, las energías renovables tienen ya el mayor potencial de mitigación al menor costo. En la última década, los costos de la energía solar y la eólica bajaron el 85%y el 55%, respectivamente.
La implicancia de inversiones fósiles en lugar de energías renovables e innovadoras
México debe reducir las emisiones de manera urgente. Según el analista. “Es inconcebible construir infraestructura nueva para combustibles fósiles; hay que evaluar el riesgo de quedarnos con activos varados. No deberíamos invertir en una refinería cuando ya sabemos toda esta historia”.
“La economía del mundo está transitando. El Banco de México está preocupado porque se sigue invirtiendo en tecnologías que ya están de salida. Es fundamental además eliminar totalmente el uso del carbón para la generación eléctrica”, confió.
La economía se está electrificando mundialmente y la utilización de plantas fósiles quedará obsoleta. Desde el sector predicen que inclusive los medios de transporte para el 2030 seguramente serán mayormente eléctricos.
Soluciones para reducir emisiones hacia el mediano plazo
De todas formas, para Flores hay luz al final del túnel ya que es posible llegar a una meta de emisiones cero neto en México hacia el mediano plazo y compartió los pasos a seguir.
El financiamiento climático para la mitigación debe ser de 3 a 6 veces mayor para el 2030 para limitar el calentamiento por debajo del 2°C.
“Se requiere una combinación de 21 estrategias de política en todos los sectores, lo cual implica responsabilidad compartida con todos los actores. La mayor transformación debe centrarse en tres sectores que contribuyan con 2 ⁄ 3 de la meta: electricidad, transporte e industria”, aseguró.
Para eso, hace falta una gran transformación en la generación eléctrica con nuevas tecnologías y cambios de patrones de producción y consumo.