La Secretaría de Asuntos Estratégicos de Argentina creó la “Mesa Intersectorial del Hidrógeno”, un espacio público – privado, en el ámbito del Consejo Económico y Social, a fin de contribuir en el diseño de una “estrategia nacional integral” del H2 de bajas emisiones.
Asimismo, la Resolución 3/2023 publicada en Boletín Oficial plantea la promoción de nuevas cadenas de valor del hidrógeno, en el marco del desarrollo sostenible y los procesos de transición energética y de descarbonización.
Como también la generación de propuestas que contribuyan a que las jurisdicciones y entidades competentes puedan coordinar y articular acciones y políticas en la materia, difundir insumos técnicos, específicos o transversales vinculados al H2, fomentar su economía del y promover el diálogo con el sector privado, la sociedad civil y el sector científico tecnológico.
“Tenemos recursos naturales como el hidrógeno que vamos a exportar, pero la decisión compartida entre todos los actores es que ese proceso sea acompañado por la localización del desarrollo tecnológico y de producción industrial”, expresó Mercedes Marcó del Pont, secretaria de Asuntos Estratégicos.
Pero si bien desde el rubro privado vieron como positiva la continuidad de una mesa intersectorial, criticaron la visión de la funcionaria con respecto a ver el hidrógeno como un producto meramente a exportar.
“Lo bueno es que se intenta darle continuidad a lo iniciado por el Consejo Económico y Social en la gestión de Gustavo Beliz (ahora ex secretario de Asuntos Estratégicos). Ahora lo esperable es que la convocatoria sea amplia verdaderamente, acorde a la dimensión de la tarea. De todas maneras me sigue preocupando que se pienso todo con una inmediatez que no resulta creíble”, sostuvo Juan Carlos Villalonga, presidente de GLOBE y miembro de la PlataformaH2 Argentina, en conversación con Energía Estratégica.
“Sin embargo, las palabras de Mercedes Marcó del Pont son similares a decir «tenemos computadoras que vamos a exportar». Asimilar al hidrógeno a un recurso extractivo es no entender de qué se trata, porque el hidrógeno es un producto industrial y así debe ser pensado”, agregó.
“Poseer buenos y abundantes recursos eólico y solar sólo nos sirve para imaginar una posible producción de hidrógeno, no mucho más. Pero a partir de ese potencial es que comienzan las diferentes etapas de una industria que es capital intensiva, desde la generación eléctrica hasta la obtención de productos finales en base a hidrógeno, pasando por la electrólisis del agua. Entonces, es determinante para planificar el desarrollo del hidrógeno bajar dramáticamente los costos de capital, del financiamiento y bajar los riesgos de nuestra economía que encarecen nuestros productos industriales”, continuó.
Cabe recordar que Beliz fue, junto a Matías Kulfas (ex Ministro de Desarrollo Productivo) quienes llevaron adelante parte de la política vinculada al hidrógeno y la estrategia nacional al 2030. E incluso, dicho funcionario fue quien vaticinó que desde Poder Ejecutivo ya trabajaban en un plan de acción y que presentarían un proyecto de ley nacional sobre el H2V.
Del mismo se dio a conocer que sería un régimen de promoción de treinta años con foco en la producción local, la utilización del H2 en procesos industriales, desarrollo de cadenas de valor y la consolidación de focos productivos, transporte, logística y exportación.
“Serán esquemas de hasta diez años de derechos de exportación de 0% para hidrógeno verde y 1,5% azul y rosado. Hablamos de la exención de pagos de derechos de importación y tasa estadística de impuestos especiales, tasas y gravámenes por una década para la introducción de bienes de capital nuevos, líneas de producción completas, partes, componentes y repuestos, con una visión puesta en que, a futuro, esas mismas empresas se comprometan en el desarrollo de componentes locales”, anticipó Fernando Brun, embajador de Argentina ante Alemania.
Y aunque aún no se consumó, dentro de la convocatoria a las sesiones extraordinarias del Congreso se incluyó el tratamiento de proyectos de ley para la promoción de nuevas energías, e inversiones con valor agregado en el sector energético.
Iniciativa que aún no se especificó pero no se descarta que allí se abran las puertas al envío de una normativa del hidrógeno, aunque no necesariamente verde, sino con mayores guiños al azul, debido a que Flavia Royón, secretaria de Energía, vinculó la iniciativa del H2 con el gas natural licuado.