En el marco del “Europe Future Energy Iberian Renewable Summit, realizado en Madrid, portavoces de bancos multilaterales de desarrollo, administradores de fondos de inversión y otros reconocidos profesionales del sector renovable analizaron la rentabilidad de los proyectos de hidrogeno verde.

Uno de ellos, fue Sergio Martinez Guzman, Senior Loan Officer Global Partners, Corporates, Energy and Infrastructure LATAM en el Banco Europeo de Inversiones (BEI), entidad que ofrece financiación a las empresas mediante capital riesgo y otros instrumentos tanto en Europa como en Latinoamérica.

Durante el panel “Renovables e Hidrógeno: Energía limpia 24/7”, el especialista respondió las siguientes preguntas y detalló los requisitos más importantes a tener en cuenta a la hora de solicitar el financiamiento de proyectos del vector energético.

¿Qué condiciones necesita un proyecto de hidrógeno verde para obtener financiamiento?

El mensaje que doy a las empresas es muy claro y duro a la vez: “Traigan proyectos, no ideas”. En el mercado vemos millones de ideas muy buenas que sobre el papel funcionan, pero cuesta mucho volcarlas a la realidad.

Hay que preguntarles a los clientes cual será el ingreso estimado de ese proyecto y el uso de ese hidrógeno. No estamos viendo que todos estos proyectos tengan un modelo de negocio detrás por lo que es muy difícil que una empresa llegue a invertir en ellos y que un banco pueda financiarlo.

Para que un proyecto de hidrógeno verde obtenga financiamiento hace falta un modelo de negocio, un plan de viabilidad y una demanda capaz de pagar el premium.

Como banco podemos aportar financiación competitiva junto con otras entidades financieras, soluciones y mecanismos de garantía, pero eso solo va a disminuir el costo de la deuda. El resto del viaje depende de los desarrolladores y fabricantes de equipos.

¿Cuál es el precio que deberíamos tener de hidrógeno para superar las barreras de competitividad?

No hay un precio específico. Si bien todos sabemos que el precio mínimo es la alternativa más eficiente, eso no va a ocurrir en un futuro próximo.

En Latinoamérica y en la Unión Europea vemos muchos proyectos piloto que consisten en pequeños estudios que hacen las empresas para entender cómo funcionan y operan los equipos, calcular costos de mantenimiento e identificar sus averías más frecuentes, entre otros factores.

Debido a que no hay experiencia operativa suficiente no tendría sentido sacar proyecto de 1 GW porque nadie los financiaría. Por eso creemos que es mejor empezar con pequeños proyectos piloto.

Los precios de esos proyectos seguramente van a ser más altos que los proyectos más grandes porque no hay economía de escala en la cadena de valor de los electrolizadores y el resto de los equipos. No obstante, necesitamos una demanda que esté dispuesta a pagar el premium y que gran parte pueda ser transferido al consumidor final. 

Vemos usos muy interesantes en industrias donde el costo del hidrógeno no tiene una transferencia grande al precio final del producto como refinerías, explosivos y el nicho de la química industrial. Esas absorben parte de esos sobrecostes de hidrógeno verde produciendo un producto final.

Hay empresas que si invierten en estos desarrollos por su responsabilidad social corporativa y por querer ser los primeros en apostar en energías verdes y dar ese mensaje al mundo.

Desde el BEI miramos con buenos ojos esos proyectos que tienen off takers con ganas de comprar el producto, desarrolladores claves y socios industriales.

Tenemos apetito por proyectos bien desarrollados con efectivos modelos de negocio para brindarles las mejores condiciones financieras del mercado. Buscamos ser un actor clave en la financiación de proyectos competitivos vinculados al hidrogeno verde que con garantías públicas puedan absorber el riesgo tecnológico.

Completamente enfocados con las políticas de descarbonización, el BEI tiene los instrumentos financieros y los equipos técnicos para financiar los proyectos con estas características.

La entrada BEI revela factores clave para volver bancables y competitivos a los proyectos de hidrogeno verde  se publicó primero en Energía Estratégica.