La subasta inversa por ronda sucesiva se impone como una alternativa para implementar en convocatorias de suministro eléctrico en mercados de Latinoamérica. Distinta a la modalidad de sobre cerrado, esta variedad electrónica ha demostrado ser la más transparente para una competencia reñida por precios a la baja, despertando voces a favor y en contra.

En la región, un caso de éxito reciente es la Licitación Abierta PEG-4-2022 donde el 75 % de los proponentes adjudicados incluyeron energías renovables en las ofertas realizadas para cubrir los requerimientos de potencia y energía de distribuidoras guatemaltecas.

La PEG-4 concluyó, tras 37 rondas sucesivas, obteniendo precios históricos con un valor medio con indexaciones de 20.329 USD/MWh el mínimo y de 79.96 US/MWh el máximo. Y pudiendo cubrir la totalidad del requerimiento de 235 MW por año (40 MW para el bloque de energía generada y 399,3 MW distribuidos en distintos periodos para el bloque de potencia garantizada).

Aquellos resultados motivaron a que no sólo Guatemala evalúe incorporar esta modalidad en su próxima convocatoria, la Licitación PEG-5 que promete ser la más grande y sostenible de su historia, sino que además otros países de Centroamérica estarían barajando la posibilidad de implementarla en el corto plazo.

Ahora bien, así como hay promotores de la subasta inversa, hay quienes cuestionan su adopción en nuevos mercados principalmente argumentando que propicia una canibalización de precios y adjudicación a oferentes especuladores, ¿esto es así?

Energía Estratégica se comunicó con el especialista en subasta de compra/venta de energía y mercado eléctrico mayorista, Julián Nóbrega, gerente de proyectos de Quantum América, para que arroje luz a este tema y destierre mitos que circulan en torno a esta modalidad.

¿Qué hay de verdad en la canibalización de los precios por subastas inversas?

Nosotros consideramos que no es canibalización de precios, sino que es un comportamiento básicamente de oferta y demanda. ¿Por qué? Porque los oferentes arrancan con un precio alto y empiezan a disminuir su oferta hasta llegar a un precio justo a adjudicar. No tiene nada de canibalización, si se alcanza determinado precio es porque hay oferentes que están dispuestos a vender a ese precio y están desplazando a oferentes más caros, como ocurre en otro tipo de modalidad de subastas. 

Ante eso, ¿cómo las subastas inversas se protegen de que especuladores resulten adjudicados o es uno de los riesgos que se corren en toda subasta?

No porque sea inversa, vas a tener una mayor probabilidad de que participe algún actor a presentar un proyecto, ganar y después intentar salir a venderlo sin poder ejecutarlo porque el precio del contrato no cubre los costos.

Si vemos subastas por sobre cerrado, en el caso de Argentina ha pasado en rondas RenovAr que se adjudicaron proyectos de precios bastante bajos que después no se pudieron ejecutar. Por eso, ese riesgo se debe evitar previamente sea una subasta de sobre cerrado o de rondas sucesivas.. 

¿Por ejemplo? 

Tienes que permitir presentar una oferta técnica y una oferta económica a oferentes que sean previamente analizados, presentando garantía de cumplimiento de contrato, garantía de cumplimiento de la oferta, que tengan el precedente suficiente para determinar que el oferente es viable para realizar un proyecto de esta magnitud, antecedentes, etcétera. 

¿Qué otras variables deben entrar en el análisis de oferentes para evitar especuladores?

Bueno, el análisis técnico previo es esencial. En el caso de Guatemala, por ejemplo, que es un país donde se realiza subastas inversas por rondas sucesivas, la oferta técnica se presenta un mes antes para poder ser analizada y determinar si es viable desde el punto de dónde se va a conectar el proyecto, que tenga garantía suficiente y que tenga coherencia la oferta, por ejemplo en su perfil. Si pasan esa evaluación técnica, después van a competir por el precio.

¿Qué ventajas pueden encontrar los oferentes en este tipo de modalidad de subasta inversa? 

Los oferentes tienen claridad en que están vendiendo energía a un precio justo y tienen la posibilidad de llegar a un punto donde ellos también están dispuestos a vender.

Este mecanismo soluciona el problema para quienes pueden ajustar mínimamente su oferta para ser adjudicados, evitando situaciones como las ocurridas anteriormente en Panamá, donde ofertas que superan por un dólar o menos a la del oferente virtual no fueron adjudicadas, dejando el requerimiento parcialmente cubierto.

Por otro lado, las subastas a sobre cerrado dependen en cierta medida de la “suerte” para lograr una adjudicación a un precio justo, ya que no se conocen de antemano los precios de la competencia. Esto puede llevar a que un oferente quede fuera por pocos centavos o, en otros casos, que termine vendiendo a un precio significativamente inferior al del resto. En contraste, las subastas inversas eliminan este problema, ya que los precios adjudicados son aquellos en los que se equilibran oferta y demanda.

¿Cómo funciona su algoritmo o, en líneas generales, cómo es el procedimiento lógico que sigue la subasta inversa para permitir que se cubra todo el requerimiento o la mayoría del requerimiento por el que se está compitiendo, mientras se reducen los costos?

Arranca la subasta, se cargan los precios iniciales, es decir, se larga la ronda número 1. Con esos precios iniciales, que generalmente son altos, se corre el modelo Optime y se determinan los resultados de la ronda incial. 

De ahí se analiza lo que es el índice de competencia (IC) versus el factor de competencia (FC). El índice de competencia es básicamente cuántas veces supera la oferta a la demanda. Vamos a poner, por ejemplo, en el caso de la PEG-4, se presentaron 1,000 MW y el requerimiento era 235 MW. El índice de competencia en la PEG-4 estaba en 4.25, prácticamente 4 veces la oferta versus la demanda. Y el factor de competencia es un factor de competencia que determina el regulador. En el caso de la PEG-4 fue 1.10. O sea, estamos comparando un 4.25 versus 1.10.

Flujo de Subasta por Rondas Sucesivas

Cuando el índice de competencia es menor que el factor de competencia, se realiza una nueva ronda. Si el oferente fue seleccionado, tiene posibilidad de mejorar el precio o no mejorarlo y volver a presentar la oferta. Generalmente, quienes fueron seleccionados no van a reducir el precio, pero podría ser el caso. Ahora bien, el oferente que no fue seleccionado tiene que sí o sí mejorar el precio para seguir participando. Si no mejora el precio, se retira de la subasta. Esa mejora de precio es establecida por el mecanismo de subasta. Las rondas van avanzando hasta que llegará un momento que algunos oferentes se retiran porque no estan dispuestos a seguir bajando los precios de sus ofertas. 

A medida que esos oferentes se van retirando, el índice de competencia va reduciéndose. Dijimos, arrancamos el PEG-4 con 1,000 MW lo que equivale a un índice de competencia de 4.25 , a medida que se retiran oferentes los 1000 MW ofertados disminuyen, por lo tanto disminuye el índice de competencia sucesivamente hasta que llega un punto en el cual el índice de competencia es menor que el factor de competencia. Cuando sucede eso, es el procedimiento por el cual se frena la ronda sucesiva y se ejecuta la última ronda. 

Si el requerimiento es de 235 MW y el factor de competencia 1.10, se solicitan reducciones hasta que la oferta llegue a 258 MW. Hasta ese entonces, quiere decir que hay oferta suficiente para abastecer el requerimiento a los precios ofertados en dicha ronda. Cuando se supera este límite en el que el índice de competencia es menor al factor de competencia (para poner en número el ejemplo, cuando la oferta está por debajo de 258 MW) se lanza ronda final y se adjudican a los ganadores.

Se puede observar que en ningún momento se le solicita a los oferentes presentar precios menores que los que otro oferente está dispuesto a ofrecer. Solo que, a los que no son seleccionados por precio, se les solicita una reducción para seguir participando, y en caso no están dispuestos a bajar precio, se retiran dejando la adjudicación a quienes ofertaron el menor precio.

¿En una subasta inversa se puede anticipar si se cubrirá el total del requerimiento? 

Primero, el requerimiento se determina previo a la licitación en base a las proyecciones de demanda que tengan las distribuidoras. Si se presentan ofertas por encima del requerimiento y los precios son competitivos, en base a lo que determina el regulador manejado mediante el Oferente Virtual, ya sabemos que al menos se va a adjudicar el 100%.

En este escenario, ¿qué es competitivo y qué rol tiene el oferente virtual? 

En el caso de Guatemala, el oferente virtual que limita la competencia se abre únicamente si se ve que los oferentes no están compitiendo o que no hay suficiente oferta para cubrir el requerimiento.

Pero cuando hay competencia, como fue en la PEG-4 y seguramente va a ser la PEG-5, los oferentes van a seguir compitiendo entre ellos para cubrir el requerimiento. La PEG-4 arrancó con 1,000 megavatios ofertados y terminaron cubriéndose los 235 MW con los precios más competitivos. 

Precios, empresas y más detalles de las ofertas ganadoras de la licitación de Guatemala

La entrada ¿Canibalización de precios y especuladores adjudicados? Desterrando los mitos de las subastas inversas en potencia y energía se publicó primero en Energía Estratégica.