Las cámaras y federaciones de empresarios expendedores de combustibles que integran CECHA declararon el “estado de emergencia en todo el país tras sucesivos reclamos al Gobierno, sin una respuesta concreta, y teniendo en cuenta que las comisiones dadas por las empresas petroleras no han sido contractualmente adecuadas frente a la creciente disminución de la rentabilidad del sector”, se indicó.
Un comunicado de la entidad puntualizó que “estamos con la soga al cuello, la inflación y el retraso en los precios de los combustibles hace insostenible mantener las estaciones abiertas. Necesitamos una solución”.
Al respecto reiteraron que “desde la pandemia venimos registrando pérdida de rentabilidad en el sector con caída de ventas y el congelamiento de precios. Luego, el cuadro fue mejorando paulatinamente pero hoy nos encontramos en un contexto crítico producto de la inflación y el retraso en los precios en los surtidores”, aseguraron.
Los expendedores consideraron que el programa Precios Justos plantea un sendero de incrementos regulados, pero no alivia la situación de los estacioneros, ya que no se equipara al índice de precios generales y no alcanza a cubrir los aumentos de sueldos acordados. “Las variables macroeconómicas y energéticas condicionan hasta el hartazgo nuestra actividad”, denunciaron.
Según números de la CECHA los ingresos de las estaciones de servicio por venta de combustibles -en promedio el 10 % del precio en surtidor- se encontraron congelados durante el período mayo 2021 a enero 2022 y luego contenidos por el sendero de precios en el período diciembre 2022 a mayo 2023.
“Si proyectamos a agosto de este año, el descalce entre los ingresos contenidos y los egresos actualizados llevará a que la mitad de las estaciones de todo el país no alcance el punto de equilibrio hoy ubicado en 330.000 litros por mes”, alertaron.
“Necesitamos medidas paliativas que nos permitan salir de la crisis que estamos viviendo, poder cubrir los costos de la operación diaria y cumplir con los acuerdos paritarios. Frente a la falta de respuesta del Gobierno y con el solo objetivo de garantizar el funcionamiento de las estaciones y los miles de puestos de trabajo, hemos decidido declarar el estado de emergencia y tomar las medidas a nuestro alcance para revertir esta situación”, explicó la CECHA.