Celsia, compañía de energía del Grupo Argos, publicó los resultados del primer trimestre, en los que se destacan inversiones por 293 mil millones de pesos colombianos (unos 78,5 millones de dólares) para el mejoramiento de la red, el servicio de energía a sus clientes y la transformación energética del país con el impulso de energías renovables.

Las inversiones en distribución sumaron 76.600 millones de pesos, lo que tiene un efecto positivo en el servicio que se ofrece a los clientes. En el Valle del Cauca estas superaron los 42.000 millones de pesos, mientras que en Tolima las inversiones en continuidad y expansión fueron por 34.000 millones de pesos.

Igualmente, se vienen realizando la construcción, repotenciación y modernización de subestaciones, circuitos y sistemas de control para hacerlos más confiables y seguros. Se destacan los indicadores de calidad del servicio en Tolima, en el trimestre el SAIDI fue de 10 horas con una mejora del 37% respecto al año anterior y el SAIFI de 7,6 veces mejorando el 7%.

La disponibilidad de los activos de distribución se mantiene al 99%, tanto en Valle como en Tolima. Los indicadores del servicio al cliente son positivos, gracias a las inversiones y a los trabajos de mantenimiento, lo que ha permitido una disminución del 18% en las quejas y reclamos de los clientes, en comparación con el mismo período del año anterior, y un 23,4% contra el último trimestre de 2020.

Asimismo, la compañía continuó con la aplicación de la opción tarifaria, lo que les permitió a los clientes tener una menor tarifa respecto a la aprobada. Este menor cobro para los clientes representó para el primer trimestre 35.500 millones de pesos, de los cuales 23.500 millones de pesos corresponden al mercado de Tolima.

En el período los subsidios en la tarifa sumaron 58.000 millones de pesos. De este monto, en el departamento de Tolima se aplicaron 23.300 millones de pesos, siendo relevante en este mercado la inclusión del estrato 3, el cual no accedía a este beneficio en el primer trimestre del 2020.

«Seguimos optimistas frente al 2021, a pesar de las complejas circunstancias de los últimos días. Nuestro propósito es avanzar con los proyectos de crecimiento y con las inversiones en mejoramiento del servicio a nuestros clientes», resaltó Ricardo Sierra, líder de Celsia.

Inversiones fortalecen la matriz de generación de Celsia

En el primer trimestre empezó a operar Celsia Solar El Carmelo, una granja fotovoltaica de 9,8 MW de capacidad, ubicada en Candelaria, Valle del Cauca.

Esta central, dirigida por una ingeniera, se construyó en medio de la pandemia y generó 182 puestos durante las obras, con un 63% de empleo local y la contratación de un 23% de mujeres.

Con esta granja se evitará la emisión de más de 640 toneladas de CO2 al año, lo que equivale a sembrar 106.000 árboles, contribuyendo así con la mitigación de los efectos del cambio climático. En la plataforma solar, en alianza con Cubico Sustainable Investments, se proyecta tener 620 MWp nuevos entre operación y construcción.

En Panamá Celsia está avanzando al 95% con otra planta: el proyecto Celsia Solar Prudencia, la primera de este tipo que la compañía construye en ese país.

Tendrá una capacidad de 9,69 MW y generará 17 GWh–año, lo que equivale al suministro de energía para 4.000 hogares. Esta granja se conectará a la subestación de la central hidroeléctrica Prudencia, en Chiriquí, que se encuentra en un terreno anexo. Se espera que en el mes de junio esté en operación.

En el proyecto El Tesorito se avanzó en las vías internas y en la adecuación de vías de acceso, y se mantienen las gestiones ambientales y sociales con la comunidad. Al 31 de marzo se tenían 399 personas empleadas, de las cuales 252 son de las comunidades del corregimiento San Antonio y la vereda Los Laureles, así como de otras zonas de Sahagún, en Córdoba.

Se está trabajando para adelantar la entrada en operación del proyecto, que tiene 200 MW de capacidad y otorgará el respaldo y la confiabilidad que el país necesita.

Resultados financieros

Los ingresos consolidados de Celsia alcanzaron los $980 mil millones, registrando un incremento de 5,6% respecto al año anterior. El buen comportamiento del ingreso se debe a la puesta en operación de la PCH San Andrés y las granjas solares de El Espinal y El Carmelo, y a mayores ingresos por generación y servicios de conexión. Colombia representó el 87,5% de los ingresos y Centroamérica el 12,5%.

En el primer trimestre el ebitda consolidado alcanzó $336 mil millones, con un aumento de 1,7% respecto al mismo período del año anterior y un margen ebitda de 34,3%. Por regiones, en el trimestre Colombia contribuyó con el 86% del ebitda, al sumar $289 mil millones; y Centroamérica contribuyó con el 14%, alcanzando $47 mil millones.

La reducción en los gastos financieros asociada al manejo de la deuda y la disminución de las tasas de referencia contribuyó a que la ganancia neta consolidada en el trimestre fuera de $115.700 millones, con un aumento de 33,4% respecto al año anterior. Al descontar el interés minoritario, el resultado neto atribuible a los propietarios de la controladora registra una ganancia de $83.500 millones, un aumento del 28,4%.

Pasando a las cifras de endeudamiento, la compañía cerró el primer trimestre con una deuda consolidada de $4,2 billones y un indicador de apalancamiento de 3,1 veces deuda neta a ebitda. Frente al año 2020, el efecto de la devaluación del peso colombiano en la consolidación de la deuda de Centroamérica fue de $86 mil millones.

Para finalizar, Ricardo Sierra manifestó: «Estos resultados del primer trimestre reflejan la puesta en servicio de activos de generación y transmisión que tomaron varios años de construcción, y el entusiasmo que han puesto nuestros colaboradores en seguir prestando el mejor servicio a nuestros clientes, a quienes agradecemos su confianza».