La pandemia no parece detener el aumento de usuarios regulados -residenciales, industriales y comerciales- que optan por autogenerar su propia energía a partir de fuentes renovables, procedimiento conocido como Generación Distribuida.

De acuerdo al último reporte de la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) sobre la industria energética, de enero a julio de este año se han conectado 1.322 emprendimientos por un total de 19.659 kW.

Se trata de un número que esperanza la llegada de un nuevo record. A saber, durante los 12 meses del año pasado se conectaron 1.541 proyectos por 31.479 kW. Todo indicaría que este 2021 será superador.

Fuente: SEC

Según las estadísticas, durante el primer semestre el volumen de conexiones que se viene dando este año es mayor a cualquier otro, lo que hace suponer que el 2021 termine con volúmenes de conexión en net billing por encima de los 32 MW.

Fuente: SEC

Ordenar el espectro

Cabe recordar que, en marzo pasado, el Gobierno de Chile lanzó la Plataforma de Información Pública para Generación Distribuida que permite a todos los usuarios, desarrolladores y clientes de las distribuidoras o cooperativas, obtener información técnica y comercial sobre las redes de distribución existentes en el país, pudiendo con ello determinar fácilmente la posibilidad de instalar un sistema de generación distribuida para autoconsumos y PMGD.

Además, los desarrolladores de proyectos podrán utilizar esta información para determinar de mejor forma el mercado potencial de generación distribuida y poner esfuerzos donde éste se pueda desarrollar de manera óptima. De esta manera, la Plataforma permitirá disminuir las barreras de entrada a los proyectos y estimular la penetración de estos.

Esta plataforma de información pública es también uno de los primeros pasos que se están dando para transformar la red de distribución en una red más inteligente y con mayor penetración de energías renovables.

No obstante, según los y las especialistas, Chile debería tomar una política más proactiva para que los usuarios regulados tiendan a autogenerar su propia energía.

Algunos plantean elevar el límite de conexión hasta 500 kW y que se creen líneas de financiamiento para la adquisición de fuentes renovables.