El Comité Diálogo Ambiental, organización ambiental de base comunitaria, desde 1996 vela por la conservación y restauración del medio ambiente y los recursos naturales del territorio puertorriqueño. 

En lo vinculado al sector energético, en los últimos 25 años se ha manifestado en contra del avance de centrales de generación térmicas a carbón y de ciclo combinado a gas natural con alta contaminación y evasión de medidas de mitigación.

Recientemente, este Comité también se ha pronunciado en contra de la ejecución de parques de generación solar fotovoltaica que se encuentren ubicados en cuerdas clasificadas por la Junta de Planificación como terrenos de alto valor agrícola y que pertenezcan a empresas que cuenten con centrales térmicas que incumplan con sus compromisos de mitigación.  

Víctor Alvarado, portavoz del Comité Diálogo Ambiental, explicó a Energía Estratégica que, sin ir en detrimento del desarrollo de una cartera de energías renovables en el archipiélago, desde el espacio que representa sostienen que el gobierno debe redefinir sus prioridades y evitar suscribir contratos como los recientemente firmados entre la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) y generadoras solares de gran escala (ver), evitar el desarrollo de nuevos proyectos de generación fósil (ver), y destinar fondos FEMA para techos solares y baterías para el cliente final y no para reparación de centrales termoeléctricas de la estatal (ver). 

“El gobierno de Puerto Rico incluso está proponiendo hacer otra planta a gas natural cuando en Puerto Rico cerca de la mitad de la energía ya la estamos produciendo con fósiles. Nosotros entendemos que esa transición de la que tanto se habla con gas natural ya estamos en ella y ahora hay que ir por energías renovables”.

“Lo que estamos proponiendo es que el dinero que se está diciendo que va a venir de parte de FEMA a Puerto Rico para el sistema eléctrico o para proyectos energéticos (ver) se utilicen prioritariamente para las personas de escasos recursos, y que los más vulnerables puedan tener un acceso más rápido para tener sus placas solares en los techos de sus casas con baterías”, expresó.

Y es que los miembros del Comité Diálogo Ambiental promueven un modelo energético que no sólo procure la sostenibilidad medio ambiental a la vez que refuerce la resiliencia y descentralización del sistema eléctrico local, sino que también permita democratizar el acceso a fuentes de generación y almacenamiento. 

Por eso, desde el Comité adhieren a la iniciativa «Queremos sol» que indica que la “prioridad debe ser dar preferencia al “recurso techo”a nivel residencial, comercial e industrial, que con uso distribuido y adecuado de almacenamiento, no representa problemas de interconexión con la red”. 

“En Queremos Sol se presentó un estudio que demuestra que en 15 años Puerto Rico podría tener el 75% de la energía renovable distribuida producida por placas solares en los techos”, indicó Alvarado (ver). 

Y agregó, en relación a una reunión que mantuvieron la semana pasada miembros de Queremos Sol con la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de Estados Unidos

“Hemos presentado a Lisa García, administradora de la EPA para la Región 2 y Carmen Guerrero, directora de la EPA en el Caribe, este tema de porqué debemos invertir más en utilizar los techos para placas solares y la propia directora nos dijo que Biden está moviéndose hacia eso y está dirigiendo su política a la protección del ambiente y en términos energéticos a utilizar las energías renovables, por lo que hay una oportunidad incluso de tener más fondos”. 

“Pero está chocando un poco la aspiración que tiene Biden con lo que el gobierno de Puerto Rico realmente está haciendo aquí con los fondos que podrían estar disponibles. Por lo que una de las grandes preocupaciones que tenemos es que el gobierno de Puerto Rico ya esté tan adelantado en su propia política que siga impulsando ya sea proyectos de gas natural o parques solares de escala y que no tome en consideración lo que más necesita hoy Puerto Rico que son techos solares y baterías”.