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El gobernador Axel Kicillof quedó en una encerrona política porque anticipó que la provincia de Buenos Aires no va a adherirse al Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI), pero tampoco quiere perderse la inversión de US$ 50.000 millones que planean hacer YPF y la malaya Petronas para construir una planta de licuefacción de Gas Natural Licuado (GNL) para exportar la producción de Vaca Muerta. Por eso, impulsa un proyecto de ley en la Legislatura bonaerense específicamente para otorgar beneficios provinciales a la licuefacción de GNL en el puerto de Bahía Blanca.
El proyecto de ley se llama Bahía GNL y establece reducciones al Impuesto Inmobiliario y al Sello, en los Ingresos Brutos y tasas portuarias, entre otros beneficios que puede otorgar la provincia. La intención es quedarse con el proyecto de YPF y Petronas y evitar que se instale en Río Negro. El gobernador de esa provincia, Alberto Weretilneck va a adherirse al RIGI (el gobierno nacional todavía no lo reglamentó) y propuso el puerto de Punta Colorada, a 560 kilómetros más al sur que Bahía Blanca.
El proyecto de ley de Kicillof trabaja principalmente sobre el Impuesto al Sello, que hace un descuento del 15%, y los Ingresos Brutos (IIBB), que propone un descuento que es regresivo en la medida que avanzan los años del proyecto y que compromete la estabilidad fiscal por 30 años. Más allá de que Buenos Aires no va a adherirse al RIGI, para las provincias implica solamente un compromiso en los IIBB y sellos, que en el proyecto de Kicillof es similar al régimen de incentivos de la Ley Bases. Las exportaciones se realizan bajo la modalidad contractual de cartas ofertas que no pagan el Impuesto al Sello y tampoco pagarían Ingresos Brutos.
La clave en materia impositiva y de incentivos bajo la orbita de las provincias está relacionada con el nivel de tasas municipales que se vayan a cobrar al proyecto, en este caso en Bahía Blanca. Durante la gestión anterior de YPF, con Pablo González a la cabeza, se venía discutiendo un esquema de tasas municipales competitivas a nivel global que tienen que pagar YPF y Petronas. Ni en el RIGI ni en el proyecto de Ley de Kicillof se hace referencia a cuál es la tarifa que cobraría el consorcio que controla el puerto de Bahía Blanca, cuyo director lo nombra la provincia de Buenos Aires, y en la inversión de YPF y Petronas es determinante.
Con o sin RIGI
Fuentes de la provincia de Buenos Aires señalaron a EconoJournal que “es mentira que el proyecto de YPF y Petronas depende de que Buenos Aires adhiera al RIGI. Nos sorprendió lo que dijo (el CEO y presidente de YPF) Horacio Marín sobre la competencia por el proyecto según la adhesión de las provincias. La adhesión o no al RIGI no le quita ningún beneficio de los que puede dar la provincia”.
Hasta el momento, YPF y Petronas vienen en conversaciones con autoridades bonaerenses por el terreno. Las compañías ya tienen más de 1.400 hectáreas en el puerto de Bahía Blanca que designarían a la planta de GNL.
“Si la planta GNL de YPF y Petronas se instala en Bahía Blanca, igual estaría enmarcado como un proyecto nacional. Si esto ocurre, ¿el gobierno nacional no le va a permitir sacar los dólares o acceder a las exenciones impositivas como establece el RIGI?. Esto lo tiene que responder el gobierno nacional, no la provincia de Buenos Aires”, agregaron las mismas fuentes bonaerenses. Además, remarcaron que “es importante lo qué dice Petronas, no sólo lo que dice YPF”.
Beneficios del proyecto de Ley
Los beneficiarios del proyecto Bahía GNL estarán exentos de pagar Ingresos Brutos “desde la autorización de inicio de operaciones dispuesta por la autoridad de aplicación de acuerdo a la siguiente escala: a) el 70% desde la autorización hasta el mes 36; b) el 50% desde el mes 37 hasta el mes 48; c) el 30% desde el mes 49 hasta el mes 60, en que se producirá el cese definitivo del beneficio”.
Además, afirma que “los beneficiarios que posean inmuebles rurales, y/o urbanos edificados afectados a las actividades de Bahía GNL, serán eximidos del 50% del Impuesto Inmobiliario por un plazo de 36 meses”. También gozarán de una reducción del 15% del Impuesto al Sello por 24 meses.
El proyecto también establece que el 90% deben ser empleo local de Buenos Aires y los beneficiarios deberán acreditar la inexistencia de deudas impositivas con la provincia. El texto también aclara que “los beneficios tributarios no podrán ser afectados ni por la derogación de la presente Ley ni por la creación de una normativa tributaria más gravosa o restrictiva”.
La normativa prevé la creación de una autoridad de aplicación y una Comisión Bicameral en la Legislatura bonaerense para que realice un “seguimiento y aplicación del Proyecto GNL Bahía Blanca”, como el pedido de informes o proponer mejoras. La Ley deberá reglamentarse en 30 días luego de su aprobación.
Infraestructura
La propuesta de Kicillof ya comenzó el recorrido legislativo. Para competir con Río Negro pone en juego la infraestructura existente en el puerto de Bahía Blanca y el desarrollo de cadenas de proveedores locales. En el apartado de los fundamentos del proyecto de la Ley Bahía GNL señalan que esa localidad “ha desarrollado durante décadas la plataforma de exportación y producción de Gas Natural Licuado a través de su puerto”.
Y agrega que Bahía Blanca “cuenta con infraestructura portuaria adaptada y equipada para el manejo seguro y eficiente de hidrocarburos y productos químicos, lo cual es fundamental para la producción y exportación de combustibles”.
También resalta que cuenta con terrenos, muelles, infraestructura desarrollada, tanques de almacenamiento, terminales de carga y descarga, diques secos para embarcaciones de gran porte y conexiones terrestres y marítimas, que “permite reducir significativamente los costos y tiempos.
, Roberto Bellato