La secretaria de Energía, Flavia Royón, se reunió hoy con el referente energético de La Libertad Avanza (LLA), Eduardo Rodríguez Chirillo, como parte de una reunión de transición entre el gobierno saliente y el electo el último domingo en el balotaje. También participaron Guillermo Ferraro, el futuro ministro de Infraestructura de Javier Milei, y otros funcionarios de la actual gestión como el ministro de Transporte, Diego Giuliano y la secretaria de Minería, María Fernanda Ávila. Por parte de LLA también estuvieron Sergio Arberche (podría estar a cargo de Minería), y Franco Mogetta (Transporte), entre otros.
Fuentes cercanas a la secretaria de Energía indicaron a EconoJournal que se trató de un encuentro ameno y que funciona como un kick off, una transición que se extenderá durante las próximas dos semanas. Según relevó este medio, ambas partes esperan avanzar en buenos términos y de forma productiva. Dos de los temas centrales que deberá afrontar la próxima administración en el área energética son las licitaciones en generación térmica y sobre la reversión del Gasoducto Norte.
Licitaciones clave
El contundente triunfo de Javier Milei en el balotaje presidencial del domingo provocará un giro de 180 grados en numerosas políticas públicas y el sector energético podría no ser la excepción. Es probable que buena parte de los proyectos que viene realizando el gobierno de Alberto Fernández se revisarán con lupa en medio de fuertes restricciones fiscales. En esa clave, el foco está puesto en dos de las iniciativas lanzadas por la actual administración para ampliar el parque termoeléctrico y revertir el Gasoducto Norte. La intención no necesariamente es paralizar esos procesos, pero, antes de seguir, se buscará tener mayor información de la que se conoce hasta ahora sobre ambos proyectos.
Reversión del Gasoducto Norte
La obra es clave para garantizar el abastecimiento de gas del centro y norte del país porque permitiría reemplazar el declino de las importaciones de gas de Bolivia con producción de Vaca Muerta. La estatal Enarsa realizó el miércoles 25 de octubre la apertura de sobres de las ofertas económicas correspondientes al renglón 1, que abarca la reversión de cuatro plantas compresoras existentes en Córdoba, Santiago del Estero y Salta, un loop (ampliación) de 62 kilómetros junto a la traza del Gasoducto Norte y la construcción de los 22 kilómetros finales del gasoducto Tío Pujio-la Carlota.
La UTE integrada por las empresas Techint y Sacde presentó la oferta más competitiva: 146.996 millones de pesos con un descuento adicional de 3,80% que redujo el número final a 141.410 millones de pesos. De este modo, quedó al borde de obtener el contrato ya que BTU, el único competidor en carrera ofertó 183.384 millones. El problema es, como anticipó este medio, que la oferta se ubica muy por encima del tope presupuestario fijado en el pliego.
El presupuesto original publicado el pasado 1º de junio era de 59.000 millones de pesos y se aclaraba que se iba a actualizar por inflación una vez abiertos los sobres. La inflación acumulada entre el 1 de junio y el 25 de octubre se ubicó en torno al 48 por ciento. Ese ajuste eleva el presupuesto a 87.320 millones de pesos. El pliego aclaraba también que la oferta ganadora no podía estar más de 20% por encima del presupuesto de la obra.
Si se le suma un 20% a los 87.320 millones, la cifra final se ubica en torno a los $ 105.000 millones, pero la oferta de Techint-Sacde es de 141.410 millones, un 62% por encima del presupuesto, lo que obligaría a declarar desierta la licitación. Fuentes cercanas al proceso habían asegurado a EconoJournal que Enarsa estaba evaluando actualizar el presupuesto de la obra argumentando que no se ponderaron correctamente algunas variables que terminaron siendo decisivas en una coyuntura tan compleja como la actual.
Por ejemplo, el impacto provocado en los costos por la corrida cambiaria, las restricciones vigentes a la importación de bienes y las dificultades para girar dinero al exterior para abonar muchos de esos insumos. Ahora es probable que esa evaluación quede en manos del próximo gobierno.
La intención no es solo analizar las ofertas sino también los fundamentos del proyecto. Es decir, tener bien en claro cuáles son las proyecciones de gas de Bolivia. Tener bien claro cuál es el gas que va a venir del país vecino antes de adjudicar una obra bajo la ley de obra pública
Incorporación de generación térmica
El gobierno lanzó el 27 de julio una convocatoria nacional e internacional para tratar de sumar 3000 MW al parque de generación térmica. La Secretaría de Energía realizó el martes 26 de septiembre la apertura de ofertas. Se presentaron 66 proyectos para 13 provincias de 20 empresas de generación por un total de 7112 MW. El ranking lo encabezó MSU Energy, la firma liderada por Manuel Santos Uribelarrea (h), que a través de sus sociedades (la homónima y SCC Power), propuso instalar 1623 MW de potencia térmica. El podio lo completaron Sullair Argentina y Juan F. Secco con proyectos por 1.393 MW y 1.281 MW, respectivamente.
En este caso, el equipo de Milei busca tener claro si efectivamente hay una necesidad técnica de incorporar 3000 MW y no incorporar una potencia menor, sobre todo teniendo en cuenta que son contratos a 20 años en dólares. El objetivo es analizar en detalle los fundamentos técnicos del proyecto para analizar la conveniencia de la licitación.
, Redaccion EconoJournal