El gobierno de México presentó la estrategia que llevará a la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2022, con la cual espera reducir en 30% sus emisiones de dióxido de carbono hacia el año 2030, además de una meta condicionada fortalecida del 36% al 40%. 

En materia energética, la titular de la Secretaría de Energía, Rocío Nahle, aseguró que el plan incluirá la modernización de las centrales hidroeléctricas y la construcción del parque fotovoltaico de Puerto Peñasco (120 MW de 1000 MW previstos). 

México llevará lo que estamos trabajando y sus resultados. Se invirtió en el aumento de la potencia de las hidroeléctricas de la Comisión Federal de Energía (248 MW) para producir más electricidad. Y también estamos haciendo un parque solar en Sonora”, manifestó. 

“También llevamos el porcentaje de aumento de la energía renovable, donde tenemos un 29% de capacidad de renovables, incluyendo la de los privados, entonces vamos cumpliendo las metas”, agregó. 

Sin embargo, pese a que López Obrador, presidente del país, reconoció que México presentaría un nuevo plan de fomento a las renovables durante la COP 27 de Egipto, catalogado como el Plan Sonora, todo indica que sólo se detallarán las leves iniciativas de estos últimos años de gestión y desde el sector criticaron la falta de compromiso y de actualización de las metas sustentables. 

“Hay pistas que nos indican qué ese anuncio será una reducción de emisiones de gas metano, específicamente de PEMEX. Sin embargo, no sólo ya se tenía ese objetivo, sino que se trabajó en la administración de Peña Nieto, pero se detuvo hacia el final de la gestión anterior y no se retomó con la actual de AMLO”, apuntó Carlos Flores, experto en el sector energético

“No vale anunciarlo como un gran nuevo objetivo, cuando en realidad es algo que ya se tenía. Es ir a presentar un supuesto programa ambicioso de reducción de la emisión de GEI, pero no es así. Aunque el problema para AMLO es que el mundo está lleno de especialistas y entiende cuando le proponen algo cuyo sentido técnico no está respaldado, y en algún momento se darán cuenta”, continuó en conversación con Energía Estratégica. 

Y cabe recordar que la administración actual fue la que suspendió y posteriormente canceló las Subastas de Largo Plazo e impidió la inversión y entrada de más capacidad renovable al país, dando un freno a las energías limpias y poniendo en duda el cumplimiento del Acuerdo de París y la Ley de Transición Energética. 

Ante ello, surge la pregunta de si México podría virar hacia políticas públicas más sustentables para alcanzar sus compromisos ambientales en el corto plazo, a lo que Carlos Flores vaticinó que no con esta presidencia. 

“Si México logrará sus compromisos ambientales será porque el siguiente presidente, sea quien sea, venga y de un cambio en la dirección del timón que debe ser contundente, con un marco regulatorio adecuado y la confianza a los inversionistas de que México respetará esas inversiones e incluir metas ambientales mucho más ambiciosas”, concluyó.