La Rioja declaró al litio y a sus derivados como recursos naturales estratégicos por sus contribuciones a la transición energética y aportes al desarrollo socioeconómico de la provincia, como también determinó de interés público al estudio, investigación, prospección, exploración, explotación e industrialización de dicho mineral. sus derivados y el agregado de valor a los productos obtenidos.

Además, la normativa ya publicada en el Boletín Oficial riojano suspende por el término de 120 días los permisos de cateo, prospección, exploración y concesiones mineras en todo el territorio de La Rioja y le otorga la facultad al Gobernador de prorrogar el plazo por única vez. 

Y sumado al avance por la puesta en marcha de la primera Planta Nacional de Desarrollo Tecnológico de Celdas y Baterías de Litio, creada por la Universidad Nacional de La Plata e Y-TEC, estas medidas hacen pensar que, a largo plazo, Argentina posicionarse como un gran jugador en ese mercado. 

Dante Sica, cofundador de ABECEB y ex Ministro de Producción y Trabajo de la Nación, conversó con Energía Estratégica sobre tal situación y reconoció que Argentina tiene potencial en la materia y a “los dos grandes minerales que serán el soporte de la nueva movilidad a nivel mundial” (litio y cobre), pero planteó que la apuesta por el primer mineral mencionado será difícil, dada el contexto macroeconómico que atraviesa el país. 

“Hay que bajar la presión de la idea de que Argentina puede ser un fabricante de baterías sólo por tener el litio. Por ejemplo, hoy en día, una inversión para una factoría de baterías está en el orden de casi 800 millones de euros, es decir, son inversiones fuertes en la que participan varios jugadores en un sector donde la tecnología de las baterías todavía no está totalmente definida”, sostuvo. 

“Y es una apuesta riesgosa pensar que, en el marco de la inestabilidad macro, puede existir una inversión de la envergadura cuando todos los años hay nuevos avances que, de alguna manera, dejan fuera de competencia a alguna otra tecnología en vigencia”, agregó.

Es decir que, bajo la mirada del especialista, Argentina todavía necesita fortalecerse en la producción de litio y avanzar en etapas de agregado de valor, a la par que las tecnologías se desarrollan, para que, a futuro, se capten inversiones en la industria de las baterías. 

Aunque ello no implica modificar los complejizar los marcos normativos sino más bien que sea una regulación “sencilla y transparente” y, por ende, no avanzar con imposiciones que generen riesgo o compliquen el negocio. 

“Debemos dar las posibilidades para que se dé una mejora en términos de agregación de valor, procesamientos y más, pero todavía estamos lejos de ser un mercado atrayente para la instalación de una fábrica de baterías”, concluyó el cofundador de ABECEB y ex Ministro de Producción y Trabajo de la Nación.