¿Qué aspectos perjudican el escenario energético en Costa Rica? 

Lo primero que debe tomarse en cuenta es el ambiente político. El Grupo ICE tiene 70 años de haber sido creado y está dentro de la psique de toda una generación que el ICE es prácticamente intocable; inclusive, hay sectores que veneran la institución y consideran que cualquier cambio que se le haga es para afectar al país. 

Es un monopolio que sirvió durante muchos años, pero hoy ya estamos viendo las consecuencias de ese sistema donde no hay incentivos para la eficiencia. 

¿Qué puntos negativos identifica en la actualidad? 

Por un lado, estamos casi a merced de las tarifas que solicite el ICE. Y, otro punto a considerar es que no podemos seguir teniendo como legislación un traje muy viejo lleno de parches. 

¿Qué leyes y normativas vigentes podrían actualizarse y porqué no también integrarse? 

Tenemos el Decreto Ley 449 de 1949 que creó al ICE, el artículo 121 de la Constitución que regula el monopolio de la generación de energía, la Ley 7200 que regula la producción de energía por parte de privados que sólo le pueden vender al ICE y otras leyes que permiten cooperativas y establecen otros reglamentos técnicos y sectoriales, entre los que se encuentra el de generación distribuida. 

¿Se podría trabajar una ley general de energía que integre y actualice el marco actual?

No se ve un ambiente político que propicie una ley general de energía. Pero, si vamos a empezar a trabajarla, considero que necesitamos seguir al menos tres criterios: 

1-promover la eficiencia económica de los prestadores de servicios públicos. La eficiencia debe ser el norte. 

2-hacer una regulación centrada en el usuario porque al final es quién paga las tarifas. Esto aplica para residenciales y también para empresas que son en definitiva los que mueven la economía del país. Las empresas necesitan tarifas competitivas. 

3-lograr una legislación integral. Porque no hay más tela para seguir poniendo parches. 

Juan Carlos Pizarro, socio del estudio A Legal Group

¿Es pertinente tratar una Ley general de energía en la antesala a las elecciones presidenciales de Costa Rica?

Esa es la pregunta del millón. ¿Es conveniente o no es conveniente? Dependerá del ángulo que se le dé. 

Un tema es que nosotros no tenemos estadistas. Winston Churchill definía al estadista como aquel que ve la generación futura, mientras que el político sólo ve la próxima elección. 

En este momento, yo no veo un candidato hablando de la apertura en materia de energía, aunque todos saben que esta se debe dar en algún momento. 

El dilema en el que estamos es que tenemos un déficit fiscal gravísimo y el estado necesita recursos frescos pero resulta que nos damos el lujo de distribuir recursos mal y que por ejemplo el ICE termine contratos competitivos como el de una hidroeléctrica a la que sacó de línea teniendo inclusive tres veces menor precio que otra a la que permitió que encienda turbinas.