Las sanciones contra el gas y el petróleo rusos alteraron los mercados mundiales e interrumpieron el suministro de Rusia, sostuvo Michael Wieth, director ejecutivo de Chevron durante su disertación en la conferencia Ceraweek que tuvo lugar en Texas.
Según consignó Reuters, Wirth estima que el mercado global del gas natural cambió más radicalmente que el del crudo. Sin embargo, los hidrocarburos y derivados rusos aún ingresan al mercado, pero a diferentes precios, ya que los barcos ahora deben entregarlos atravesando extensas distancias hasta llegar a países que no han impuesto sanciones.
También dijo Wirth que las explosiones en los gasoductos Nord Stream, en septiembre de 2022, dan cuenta que los cambios en el sector serán duraderos.
Las sanciones occidentales incluyen el embargo de la Unión Europea a los suministros marítimos rusos de crudo y productos derivados que están en vigor desde el 5 de diciembre de 2022 y el 5 de febrero de 2023, respectivamente. Asimismo, el tope al precio de petróleo fijado por la UE, el G7 y Australia es 60 dólares por barril.
Además, Bruselas, junto con el G7 y Australia, establecieron un límite de 45 dólares por barril para los productos que se venden con descuento respecto al crudo (como el fueloil), mientras la tarifa por barril para artículos petrolíferos que se venden con sobreprecio en relación al crudo (diésel, queroseno y gasolina), se ha fijado en 100 dólares.
Por su parte, Moscú prohibió cualquier entrega de crudo bajo el esquema del tope al precio. Sin embargo, el decreto firmado por el presidente Vladímir Putin prevé que los suministros puedan ser autorizados bajo un permiso especial del mandatario.