. El presidente Javier Milei presentó el Plan Nuclear Argentino, una iniciativa que tiene como objetivo posicionar al país en la vanguardia energética y atraer inversiones. Estuvo acompañado por el jefe del Consejo de Asesores, Demian Reidel, y el director General del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi.

“Contamos con un pueblo privilegiado en capital humano, con tierras inhóspitas a baja temperatura en toda nuestra Patagonia, lo cual es una ventaja comparativa para montar servidores de Inteligencia Artificial”, explicó el mandatario al anunciar el nuevo proyecto. Además, “tenemos abundantes reservas de energía que son necesarias para abastecer cualquier desarrollo”, agregó.

Milei indicó que “se va a generar en el mundo entero un resurgimiento de la energía nuclear”, y se refirió a las “incontables campañas de desprestigio de algunas fundaciones internacionales” contra “la única fuente eficiente, abundante y rápidamente escalable para hacerle frente al desarrollo de nuestra civilización”.

Luego de presentar a Demian Reidel como el responsable del Plan Nuclear, el presidente celebró que “después de décadas de declive, la energía nuclear tendrá su retorno triunfal y nosotros no nos vamos a quedar atrás, sino que pretendemos ser pioneros”.

En rigor, la Argentina ha sido pionera en la región en cuanto al desarrollo de la energía nuclear desde el primer gobierno de Juan Domingo Perón en la década del 40. De hecho, asistió a la inauguración de la Central Nuclear Atucha I en el arranque de 1974.

Ese mismo año se inició la construcción de la Central Nuclear Embalse (Córdoba), y su inauguración data de finales de 1983.

Durante el gobierno de Néstor Kirchner se encaró el reinicio de la construcción de la Central Nuclear Atucha II, que estuvo paralizada desde el año 1994. Ingenieros y técnicos argentinos la pusieron en marcha en junio de 2014, durante el gobierno de Cristina Fernández.

En 2015 Argentina y China firmaron convenios con vistas a la construcción de otras dos central nucleares con financiamiento del país asiático, pero dicho proceso quedó trunco desde el gobierno de Mauricio Macri.

En el arranque de la Administración Milei centenares de trabajadores y técnicos del sector quedaron desafectados en la tarea de construcción, en zona aledaña Atucha II, del reactor de baja potencia Carem 25, que presentaba un alto grado de avance, en base al desarrollo de tecnología propia. Recorte de presupuesto mediante, los trabajos se reiniciaron a paso de tortuga.

Ahora, el jefe del Consejo de Asesores explicó que se trata de un “plan ambicioso que marca el renacer de la energía nuclear como la piedra angular del futuro energético argentino y mundial, en un contexto global en el que la Inteligencia Artificial y los avances tecnológicos demandan cada vez más energía”. Y agregó: “La energía nuclear vuelve a ocupar el lugar que le corresponde”.

Reidel aseguró que nuestro país está preparado para liderar esta evolución energética y que “lo hará con tecnología 100 % argentina, desarrollada por nuestros ingenieros nucleares, quienes son reconocidos entre los mejores del mundo”. Y aseveró: “Este proyecto no es solo un avance tecnológico, es un orgullo nacional”.

El Plan cuenta con el respaldo del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), lo que representa un sello de alta calidad y refuerza la posición de liderazgo en esta nueva etapa de la energía nuclear.

Para garantizar su éxito, el Gobierno nacional creará el Consejo Nuclear Argentino, presidido por Demian Reidel e integrado por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos; el ministro de Defensa, Luis Petri; y el presidente de la Comisión Nacional de Energía Atómica, Germán Guido Lavalle.

Como inicio del proyecto se construirá un reactor modular pequeño (SMR) en el predio de la Central Nuclear Atucha. Esta iniciativa, además facilitará el acceso a la energía en todo el país y disminuirá considerablemente los cortes de luz.

En una segunda etapa, se desarrollarán reservas de uranio, que servirán para cubrir la demanda doméstica y posicionará al país como exportador de elementos combustibles de alto valor agregado.

Con este Plan, la República Argentina se posiciona como un líder en el uso pacífico de la energía atómica, mientras avanza hacia su objetivo de convertirse en un hub de Inteligencia Artificial, señaló el gobierno.

Rafael Grossi, en tanto, analizó: “Es algo tan importante como la utilización de sus capacidades tecnológicas para la respuesta a problemas concretos que tienen que ver con la producción de energía”. “Estamos asistiendo a un momento internacional en el que hay un retorno muy claro a la utilización de la energía nuclear como una fuente de energía limpia, despachable y confiable”, agregó.

SM