Vaca muerta, la segunda reserva en tamaño a nivel mundial de gas no convencional, producirá suficiente hidrocarburo gaseoso para el autoabastecimiento energético argentino, empleándose no solo en los hogares, sino que posibilitará a la industria nacional, tener acceso a energía en forma abundante y a bajo costo, central para el desarrollo industrial.
Además de ello, las cuencas de Vaca Muerta tendrán excedentes en su producción que son factibles a ser comercializados en exterior vía exportación a través de gasoductos existentes y a construirse, a países limítrofes, ayudando de esta manera al Estado corregir la ya crónica restricción externa con la obtención de más divisas para el funcionamiento ordenado de nuestra economía. En el caso del gas no solo se ahorrarían las importaciones de los últimos años, sino que se contaría con un valioso insumo para la industria local y se tendría este plus exportador sumamente oportuno.
Ahora bien, existen dos formas de exportar gas natural, el primero es el comentado, a través de gasoductos de alta presión a países limítrofes. La segunda forma de comercialización, la cual viene creciendo fuertemente estos últimos años, es a través del GNL o gas natural licuado. Este sería el caso para exportar a países europeos por ejemplo. Ahora bien, ¿de que se trata el GNL, el nuevo recurso estrella de la Argentina? ¿Cómo se obtiene, almacena y transporta? Véamoslo a continuación.
Generando el Gas Natural Licuado
Básicamente el GNL es el gas natural condensado, es decir llevar el gas natural de su estado gaseoso a estado líquido. ¿Cómo logramos obtener gas natural en estado líquido, que a presión atmosférica normal se encuentra en estado gaseoso?
Para lograr esto, es decir condensarlo, y siguiendo las premisas y leyes de la termodinámica, podemos obtener gas natural en estado líquido de dos formas, o bien ejerciendo presión sobre él (con presiones muy grandes) o enfriando el mismo a muy, pero muy baja temperatura (en el caso del gas natural, el hidrogeno, etc), para de esta manera condensarlo y su posterior obtención de líquido. Este último es el proceso que se utiliza mundialmente para el caso del gas a exportar licuado. Esta metodología de obtención de gas natural en estado líquido es técnica y económicamente viable en contraposición de hacerlo a través de altas presiones.
La razón de la necesidad de convertir el gas natural de su estado gaseoso a liquido es simple: la relación entre ambos estados del gas es de 620 litros de gas natural en vapor a 1 litro de líquido condensado (GNL) – Por lo tanto, pasarlo de su estado gaseoso a liquido (condensarlo) es fundamental para optimizar y volver eficiente su capacidad de transporte porque posibilita almacenarlo indefinidamente y en grandes volúmenes lo que facilita y hace rentable su transporte. Además, con los buques adecuados (llamados en la jerga “metaneros”) puedo transportar grandes cantidades de gas natural en estado líquido.
Existen varios procesos industriales para bajar la temperatura de un gas, hasta su condensación, entre ellos podemos enumerar los siguientes métodos industriales:
- Por el llamado proceso con Turbo-expander,
- Por ciclos de refrigerante mixto,
- Por el método de cascada.
Básicamente el que se utiliza a gran escala hoy, es el de ciclos de refrigerante mixto (o cascada incorporada). Este método se trata del principio de funcionamiento de cualquier ciclo de refrigeración, como las heladeras y los aire acondicionados (con sus correspondientes diferencias), es decir con el ciclo frigorífico.
A fin de condensar el gas natural se debe bajar la temperatura del mismo hasta los 160 grados bajo cero (-162 °C, o 111 K), es decir una temperatura EXTREMADAMENTE baja, esto a presión atmosférica (1 atmosfera absoluta), logrando de esta manera un almacenaje a la presión normal.
Se obtiene así Gas Natural Licuado (GNL), un líquido móvil y transparente a –162 ºC y 1 atmósfera absoluta formado de mezclas en estado líquido de metano, etano, propano, butano y nitrógeno, en que la mayor proporción está dada por el metano y etano, (usualmente más del 90 %)
Los equipos de procesamiento, almacenaje y transporte
Las plantas de procesamiento de GNL, operan a muy bajas temperaturas (llamadas criogénicas) y utilizan aceros especiales en su construcción (en general aceros inoxidables austeniticos aptos para criogenia), lo cual encarece mucho su construcción, además los tanques de depósito también son tanques aptos para almacenar a tan bajas temperaturas, los cuales son complejos de construir y mantener.
Por supuesto, lo mismo ocurre con las bombas que impulsan estos líquidos a tan baja temperatura siendo las mismas muy particulares ya que operan a estas temperaturas tan bajas.
Incluso existen hoy plantas de licuefacción en buques que pueden ser conectados directamente a un gasoducto que los abastece de gas natural a licuar. Estos buques, los cuales existen pocos en el mundo, tienen un costo de construcción de hasta 12 mil millones de USD
Luego de que el gas se transformó en líquido, en la correspondiente planta de licuefacción, es depositado en tanques de almacenaje, para luego ser bombeado a los buques de transporte que los llevaran el GNL a sus mercados destinos. Allí nuevamente el GNL es descargardo a tanques de almacenaje o directamente a plantas de Regasificación (también llamadas revaporización) que harán el proceso inverso a la licuefacción, es decir entregarle calor al gas líquido para que vuelva a su estado gaseoso y pueda ser inyectado a las redes de gasoductos existentes, con el fin de ser utilizado en hogares e industrias.
Un nuevo paradigma productivo exportador
Argentina hoy es demandante de estos buques que proveen de gas natural, principalmente su ingreso al sistema interconectado de gasoductos nacionales, se hace desde el puerto de Bahía Blanca. Pero afortunadamente hoy nuestro país se encuentra a las puertas de un cambio estructural en su forma de abastecerse de energía, gracias a Vaca Muerta, y la construcción de infraestructura de transporte necesaria para el gas natural que esta rica cuenca puede producir.
Además de ello, y con la firma de convenios entre YPF y Petronas de Malasia, con la finalidad de la posible construcción de una planta de licuefacción de gas natural (las cuales necesitan inversiones de entre 5000 y 10000 millones de USD), tiene la real posibilidad de convertirse en un jugador importante en la oferta de GNL, precisamente en un contexto donde la demanda energía a nivel mundial sigue creciendo, y más en el ámbito de la transición energética, donde el gas natural jugara un rol preponderante. Vale aclarar que todo este de industrialización del proceso del gas a GNL no es inmediato y, continuarse estratégicamente, dará sus frutos totales dentro de aproximadamente diez años.
Desde una mirada desarrollista (la cual comparto) sin embargo, la estrategia que deberá tomar el país es claramente, además de la exportación de GNL, asegurar el suministro interno de energía abundante y a bajo precio a la nación, es decir a su industria y a su población.
Sin dudas las necesidades de divisas a nuestro ya, como dije, crónico problema de restricción externa, también puede ser mitigado con mayor valor agregado a exportar, innovación tecnológica y además, con la generación de empleo local, utilizando esa fuente energética para la transformación productiva de distintos sectores, como ejemplo podemos citar la fabricación de urea, insumo fundamental para el aumento de la productividad del campo, o la producción de litio en la puna, la cual utiliza como forma primaria de generación de energía, el gas natural.
Si bien, como en general se dice “lo urgente quita tiempo a lo importante”, es necesario para nuestro país tener claridad de estrategias a aplicar y no olvidar que el desarrollo industrial de la nación es fundamental.
Fuente: https://www.visiondesarrollista.org/gas-natural-licuado-el-proximo-recurso-estrella-de-argentina/