El presidente y CEO de YPF, Horacio Marín, sostuvo con respecto al proyecto para la producción de GNL, pensado para la exportación a terceros mercados, que “seguimos igual, no hay ningún cambio”, aún cuando trascendió que Petronas, su socia internacional (según la carta de intención que data de 2022) desistiría de participar en dicha iniciativa, cuyo desarrollo (gasoductos, planta de tratamiento y producción, almacenaje, puerto de embarque) demanda una inversión de al menos 30 mil millones de dólares.

“El proyecto físico está armado, hay una ley de incentivos (RIGI) que posibilitaría lograr precios rentables para competir en el mercado internacional, encaramos gestiones en varios países (India, Alemania) para definir contratos de compra del producto, y en los próximos días viajamos para impulsar el proyecto y posibles contratos en Hungría, Italia, e Inglaterra” describió Marín durante una entrevista realizada en el marco del AmCham Forum Energy, que tuvo lugar en Buenos Aires.

Al respecto agregó que “estamos preparando la licitación de la ingeniería de detalle y con ello avanzar en el FID (decisión final de inversión) para procurar el financiamiento para un proyecto sólido”.

“Petronas se puede ir ?…, sí, pero no hay que dramatizar si se da tal situación”, comentó Marín, quien enfatizó que “éste del Argentina GNL es un proyecto de la industria, no sólo de YPF”, en alusión a la posible participación de otras empresas operadoras del mercado local del gas.

Marín llegó a asignar a YPF una participación del 30/35 por ciento en el proyecto, procurando que el resto sea participación de otras empresas locales, y de alguna de las otras grandes jugadoras del mercado internacional, si finalmente Petronas desiste.

LAS OTRAS JUGADORAS EN EL GNL Y EL OVMS

Mientras tanto, el presidente de YPF confirmó el interés de la compañía en participar del proyecto que encabezan Pan American Energy y Golar LNG para la instalación por 20 años de un barco factoría de licuefacción en Argentina, destinado al mercado de exportación.

El barco, propiedad de Golar LNG, tendrá una capacidad de producción de 2,4 millones de toneladas anuales de GNL, equivalente a 11,5 millones de metros cúbicos día de gas natural, previéndose el inicio de la operación comercial en 2027.

El buque de Golar, empresa noruega de infraestructura marítima de GNL, se denomina Hilli Episeyo, y tiene una longitud de casi 300 metros. Fue construido en 1975 y reconvertido para el procesamiento de gas en 2017.

PAE procura además la participación en el proyecto de otras compañías productoras de gas natural en el país, y avanza en tratativas al respecto.

PAE es productor de gas en la Cuenca Marina Austral y este proyecto implica destinar gas de ése origen, que es transportado por el Gasoducto troncal San Martín hasta Buenos Aires. Resta definir el estudio técnico para determinar el lugar de operación del barco factoría. El procesamiento para la exportación de este gas será en los meses del verano, cuando merma la demanda de gas para el mercado interno. Encarar este proyecto demanda una primera inversión de 300 millones de dólares.

La relación comercial de YPF y PAE también se verificará en el desarrollo del proyecto de tendido del Oleoducto Vaca Muerta Sur, con puerto de destino para la exportación del crudo en Río Negro (Punta Colorada). La inversión se ha calculado en unos 2.000 millones de dólares.

Marín señaló al respecto que de este proyecto también participarán Pampa Energía y Vista, pero aspira a que la lista de productoras se amplíe. Encaró conversaciones con la estadounidense Energy Transfer, y cursó invitación a Chevron y Shell, que están analizando la propuesta.

En el caso de Shell, después de vender en 2018 su red de estaciones de servicio a Raízen, acentuó su participación en el desarrollo del petróleo no convencional en Vaca Muerta. Hoy produce 50 mil barriles día y aspira a elevarla a 70 mil barriles en 2025.

A corto plazo encarará la exportación de crudo toda vez que la demanda interna de crudo está cubierta, y considera entonces que debe aprovecharse la ventana de oportunidad que se presenta en el plano internacional en el contexto de la transición energética. Espera mejoren las condiciones de acceso (libre) a las divisas en el plano local.

Acerca del OVMS Marín enfatizó que “Hay que hacerlo rápido, acelerar la obra a principios del 2025 para poder transportar entre 50 y 60 mil barriles día a mediados del 2026 para su exportación”. Estimó posible exportar por este oleoducto troncal hasta 700 mil barriles día hacia 2028/2030.

“Desde YPF venimos a aumentar la torta de la energía con la participación de todas las empresas interesadas en este proyecto”, remarcó.