Por Santiago Magrone
El gobierno nacional presentó en Neuquén el denominado “Plan de Promoción de la Producción de Gas Argentino 2020-2023” que tiene como objetivos declarados “incentivar la inversión y la producción de gas para detener el actual sendero de declinación productiva de este insumo, satisfacer la demanda interna, sustituir importaciones ahorrando divisas, bajar el consecuente costo fiscal, y potenciar el empleo en esta industria.
Asimismo, el programa procurará “generar desarrollo en las regiones productoras, tanto de sus Pymes y Empresas Regionales como del resto de la Industria, y la Tecnología Nacional”.
En sus aspectos esenciales el plan definido por el ministerio de Economía –vía la Secretaría de Energía- establece un requerimiento de provisión de gas a distribuidoras domiciliarias y a CAMMESA (para generadoras térmicas) de 70 millones de metros cúbicos diarios, que se adjudicará mediante un esquema de subasta de precios entre las productoras oferentes.
El suministro de este gas será mediante contratos por tres años, con un volumen adicional en cada uno de los inviernos comprendidos en dicho plazo. Estado nacional aportará la diferencia entre el precio de adjudicación y un precio estímulo que tendrá un tope de 3,70 dólares por Millón de BTU.
Los cálculos realizados por Economía contemplan para el 2021 un costo fiscal de 1.491 millones de dólares; de 1.325 millones en 2022; y de 1.174 millones en 2023, con un ahorro final acumulado de 1.172 millones de dólares , comparado con el costo fiscal que implicaría la no aplicación de este esquema, se graficó.
El Plan Gas Argentino 2020-2023 apunta a sustituir 18 mil millones de metros cúbicos de gas que son actualmente importados, y esto a través de una inversión de 5 mil millones de dólares por parte de las empresas productoras.
De esta forma, mediante un esquema de trabajo público privado, se proyecta un ahorro de divisas por 5.629 millones de dólares. Asimismo, se prevé un incremento en la recaudación estimado en 2.525 millones de dólares, la generación de puestos de trabajo, y la incorporación de tecnología con valor agregado nacional, particularmente a través de Pymes proveedoras.
Los detalles del esquema fueron dados luego del lanzamiento oficial del Plan en un acto que encabezó el presidente Alberto Fernández en dependencias de YPF en el área Loma Campana de la formación Vaca Muerta, en Neuquén.
De dicha acto también participaron los gobernadores Omar Gutierrez (Neuquén) y Arabela Carreras (Río Negro), el ministro de Economía, Martin Guzmán, su similar de Interior, Eduardo de Pedro, el Secretario de Energía, Darío Martinez, el presidente de YPF, Guillermo Nielsen, y el CEO de la petrolera de mayoría estatal, Sergio Affronti.
Durante la presentación, Alberto Fernández sostuvo que “ponemos en marcha otra vez la economía hidrocarburífera promoviendo la producción del gas, y estoy seguro de que vamos a entender cuán importante es que el Estado se ponga al frente cuando la economía se paraliza, y que se asocie a empresarios y trabajadores para convertir todo esto en el sueño de vivir en la Argentina que nos merecemos”.
El jefe de Estado también aseguró que “este plan Gas convoca a los actores de los mercados hidrocarburíferos a confiar, a producir más y a darle a la Argentina el gas que los argentinos necesitan para vivir”.
El mandatario destacó además que “YPF es la bandera nacional en materia energética, y la necesitamos más viva y fuerte que nunca”.
Por su parte, el ministro de Economía afirmó: “El plan Gas define reglas de juego claras que van a potenciar la inversión, la producción y la generación de empleo, con una perspectiva de desarrollo federal”.
En tanto, el gobernador de Neuquén destacó la decisión del gobierno nacional de activar el plan gas y consideró que “esto permitirá fortalecer nuestras industrias, nuestros hogares y actividades económicas, generando que vengan divisas y dando respuesta a la demanda nacional y regional”.
El secretario de Energía destacó que el programa implica “que todos hagamos un esfuerzo. Los trabajadores con su experiencia, las pymes con su dinamismo y su espíritu emprendedor, las productoras con su experiencia en el desarrollo de esta industria, y los gobiernos con sus recursos naturales y planificación”.
En tanto, Nielsen ponderó que “Vaca Muerta ocupó un lugar importante cada vez que analizamos las soluciones económicas para la Argentina”, y aseguró que “YPF ha hecho las mayores contribuciones, con una puesta a punto excepcional, para extraer petróleo y gas” en Vaca Muerta”.
El Programa contempla un Esquema Participativo Federal para el control del cumplimiento de los programas de inversiones y de incremento del valor agregado nacional. Participarán el Ministerio de Economía a través de la Secretaría de Energía, el Ministerio de Desarrollo Productivo y el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación.
Asimismo, se convocará a las provincias adherentes, a las organizaciones de los trabajadores del sector y a las empresas del rubro.
Desde el gobierno se destacó que la iniciativa apunta a “la sinergia público- privada, donde el Estado lleva adelante su capacidad de planificación en cuanto al sistema de gas, estima los niveles de oferta y de demanda, y realiza una agregación de esta última en vistas a consolidar un bloque uniforme de 70 millones m3/día en los 365 días del año por 3 años. Y el mercado compite libremente por abastecer a dicha demanda, lo que favorece la reducción de precios”.
Desde Energía se destacó la puesta en práctica de “reglas claras, que dan previsibilidad de precio y plazo contractual a los productores, y normaliza un mercado de gas que en los últimos años presentaba severas distorsiones”.
Además, destacó Energía, “permite armonizar la situación entre el precio necesario que fomenta inversiones (localmente más competitivas que las importaciones), junto con una especial consideración a la tarifa que puede afrontar el usuario final residencial”.
En cuanto a las exportaciones, se considera que el incremento en la producción de gas dinamizará las ventas en firme a Chile, y fomenta las exportaciones estivales, que son una herramienta para atacar el problema de la estacionalidad (picos de demanda de gas en invierno por las familias).
“Permite disponer de mayor volumen disponible de gas durante el invierno, pero evita trasladar a precio el costo de producir o de importar, y da garantías de provisión para el segmento industrias y GNC”, señaló Energía.