Brasil sigue rompiendo récords en materia energética. En la reciente Subasta de Energía Nueva A4/2022, se registraron 1.894 proyectos renovables por un total de más de 75 GW de suministro,  (75.250 MW para ser exactos) entre centrales eólicas, fotovoltaicas, hidroeléctricas y termoeléctricas de biomasa.

Y de este modo supera cualquier registro de licitaciones de esta índole, incluso la del año pasado donde se presentaron 1.787 proyectos con una oferta de 64.586 MW de capacidad, según los datos que aporta la Empresa de Pesquisa Energética (EPE) del país. 

Para ser precisos, la Subasta actual fue anunciada el por el Ministerio de Minas y Energía a través de la Ordenanza Normativa N° 34/GM/MME/2021 y la publicación de la ordenanza de directivas se dio el pasado 22 de diciembre. 

A raíz de ello, la generación fotovoltaica fue la mayor interesada, dado que se inscribieron 1.263 emprendimientos solares por 51.824 MW de suministro, seguido de la tecnología eólica (542 oferentes que acumulan 21.432 MW), centrales hidroeléctricas (60 proyectos por 976 MW) y las termoeléctricas de biomasa (29 ofertas por 1.018 MW). 

La región nordeste tiene el mayor número de proyectos y potencias registradas para la Subasta (alrededor del 70% de los proyectos), con participación predominante de fuentes eólicas y solares. Mientras que las plantas termoeléctricas se ubican principalmente en los estados del centro-oeste y sureste, y los proyectos hidroeléctricos en las regiones sur y centro-oeste de Brasil. 

Potencia registrada por región

El 31 de marzo será la fecha límite para la entrega de la licencia ambiental, en tanto que el 12 de mayo será la expedición de títulos técnicos por EPE y el 27 de este último mes mencionado se llevará a cabo la celebración de la Subasta de Nuevas Energías A-4, que tiene como fecha de operación 1 de enero de 2026.

Una vez identificados los interesados, la EPE consultará a las empresas de transmisión sobre la factibilidad física de conectar los proyectos de generación y los clasificará de la siguiente manera en función de la disponibilidad de tramos de conexión de entrada de línea o de transformador: 

Tipo A: Con posibilidad de conexión de nuevas líneas. 
Tipo B: Sin posibilidad de nuevas conexiones (imposibilidad física y/o técnica).

Cabe explicar que las licitaciones de energía nueva son las que contratan nueva capacidad para hacer frente a la creciente demanda energética indicada por las distribuidoras, y se diferencian de las denominadas licitaciones de “energías de reserva” que son contratadas por el Ministerio de Minas y Energía-MME a efectos de contar con energía complementaria para aumentar los márgenes de reserva del sistema.

Ambas se llevan a cabo por medio de plataformas electrónicas donde, inicialmente, se registran los oferentes que son precalificados. La subasta se realiza por internet en tiempo real en base a la demanda informada por las distribuidoras.

Hay un precio base que va disminuyendo en las distintas rondas. Este proceso, denominado “subasta de reloj descendente” termina cuando se logra un equilibrio entre la oferta y la demanda. Y se espera que en esta oportunidad cierre con precios por debajo de los BRL 200,00.