El bloque de diputados de MORENA presentó la ruta legislativa para que la reforma eléctrica de López Obrador se discuta y vote en la cámara baja del Congreso de la Unión entre el 11 y el 13 de abril. Es decir, que el proceso podría iniciar al día siguiente de la consulta de revocación de mandato. 

Este hecho se da luego de que las Comisiones de Puntos Constitucionales y Energía pusieran a disposición el Acuerdo para analizar, discutir, y en su caso aprobar en comisiones, la “Iniciativa del Ejecutivo Federal por el que se reforman los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos”, bajo una modalidad semipresencial. 

Y en el mismo tenor de esto último, se detalla que las Juntas Directivas acuerdan incorporar las propuestas, opiniones o iniciativas diversas que procedan, dentro de los plazos siguientes que lo permitan en su oportunidad. 

Pero el tiempo que tendrán para ello no será demasiado, dado que el documento enviado por el partido político MORENA, señala que entre el 7 y 9 será circulado el dictamen para que su tratamiento en comisiones sea 11 de dicho mes y, una vez aprobado, se vote en el pleno de la Cámara. 

Cabe recordar que la iniciativa de reforma constitucional necesita que dos terceras partes de Diputados den su voto positivo para que pase al Senado, donde allí también requiere esa misma cantidad para que la propuesta pase a los Congresos locales de los Estados.

Pero según manifestaron los expertos del sector en diversos diálogos con Energía Estratégica, MORENA y sus aliados políticos todavía no cuentan con los votos suficientes para su aprobación, por lo que dependerá de cómo respondan los otros partidos en el Congreso. 

El PRI define el futuro de la reforma energética en México

Aunque también es preciso tener en cuenta que hay nueve gobernadores del país que ya se mostraron a favor de la iniciativa para modificar la Constitución, puntualmente los de Campeche, Chiapas, CDMX, Guerrero, Michoacán, San Luis Potosí, Sonora y Tlaxcala, 

Y si bien aún queda camino por recorrer, las renovables – y la mayoría del sector energético – se encuentran en stand by debido a la incertidumbre generada por los cambios en las reglas del juego del mercado eléctrico.