Andrés Manuel López Obrador (AMLO) volvió a dar indicios de los proyectos energéticos que prevé para mitigar el cambio climático en conjunto con Estados Unidos, luego de la visita de John Kerry, el enviado para el clima de EEUU, y de que anunciara que existen inversiones de 17 empresas privadas para desarrollar parques solares y eólicos en el país.
Para ser precisos, el máximo mandatario de México, sostuvo que está buscando la “forma de ayudar a Estados Unidos de forma mutua en el caso de que continúe la inflación y se profundice la crisis económica”, ya que bajo su mirada, “se puede hacer mucho” para integrar las economías de ambos países.
Entre esas iniciativas, AMLO nombró al recurso energético y destacó una que, particularmente, se vincula con las energías renovables: la creación de una “batería de plantas solares en el estado de Sonora hasta la frontera”.
“Sí se podría en corto plazo hacer frente a las necesidades energéticas si se unen esfuerzos, aunque lleve tiempo. Y esa iniciativa permitiría tener líneas de transmisión en Baja California (México) y hasta exportar energía eléctrica a California (Estados Unidos), o tener más proyectos de esa índole. Estamos trabajando en ello y pronto se dará más información”, aseguró López Obrador.
Lo que sorprende es que estas declaraciones dadas en conferencia de prensa llegan pocos días después de que el presidente de México reconociera que existen inversiones de 17 empresas privadas de Estados Unidos para desarrollar parques solares y eólicos en el país, por un total de 1854 MW de capacidad.
Y a eso se debe agregar que, durante su intervención en Foro de las Principales Economías sobre Energía y Acción Climática, encabezado por Joe Biden, AMLO dio a conocer un decálogo de las acciones sustentables que el gobierno mexicano busca llevar a cabo.
Actividades entre las que se encuentran la construcción de la central fotovoltaica de Puerto Peñasco (Sonora), de 1000 MW de potencia, los propios compromisos con las compañías estadounidenses y exploración para crear parques solares en la frontera de México con EEUU, así como también la construcción de redes de transmisión que permitan despachar esa energía.
Hechos que marcan un giro de 180° si se contempla que, hace poco menos de un año, Andrés Manuel López Obrador presentó una reforma constitucional en la que pretendía disminuir la participación privada en el mercado eléctrico del país y darle mayor poder a la empresa productiva del estado, CFE.