Eso significa que solamente los subsidios a las distribuidoras eléctricas equivalen a casi el triple de todo el déficit primario del sector público en el mismo período. La evolución de los subsidios en 2021 tuvo un punto de quiebre en junio, cuando se alteró la tendencia descendente en el incremento interanual observada en los primeros cinco meses.
En enero, el incremento respecto del mismo mes de 2020 había sido de 501,1%, debido a que, por lo general, en los primeros días de una nueva gestión presidencial se someten a revisión los contratos de obras y servicios públicos y eso deriva en una postergación de los pagos de la administración pública. A partir de entonces, el incremento porcentual fue descendiendo mes a mes: 350,9% en el primer bimestre, 171,4% en el trimestre, 72% en el cuatrimestre y 51% en el acumulado de los primeros cinco meses.
En junio, el aumento interanual se elevó al 69,2% y en julio al 78,9%, en medio de la necesidad de una mayor importación de combustible y un aumento del consumo de gas y electricidad, tanto entre los usuarios residenciales como en los comerciales e industriales.
Dentro de las transferencias corrientes al sector energético, después de CAMMESA se ubicaron Integración Energética Argentina (ex ENARSA) con $93.773 y un aumento interanual del 179,7% y el Plan Gas no Convencional Resolución ($49.581,7 millones, 217,6%).
Con menos participación se anotaron el Fondo Fiduciario para Subsidios de Consumos Residenciales de GLP de Sectores de Bajos Recursos y a la Expansión de Redes de Gas Natural ($10.164,5 millones, 94,8%) y Yacimientos Carboníferos Fiscales ($4.845 millones, 40,4%).
Los subsidios al Transporte totalizaron $97.977,7 millones (+66,3%), de los que $49.636,3 millones se destinaron al Transporte Automotor. Entre estos, se destacó el Fondo Fiduciario del Sistema de Infraestructura del Transporte, a través del que se subsidian a las empresas de colectivos, con $44.297 millones y un alza del 74,9%.
Además, se giraron $46.807,7 millones al Transporte Ferroviario, dirigidos en su mayor parte a las empresas Operador Ferroviario S.E. ($39.811,6 millones) y Belgrano Cargas y Logística S.A. ($4.441,1 millones), mientras que los subsidios al Transporte Aerocomercial totalizaron $1.511,0 millones, orientados básicamente a la Empresa Argentina de Navegación Aérea.
Las empresas públicas no vinculadas al transporte ni a la energía demandaron transferencias $20.152,7 millones (+79,4%), de las que $10.530 millones se destinaron a Correo Argentino, $3.675,6 millones a Radio y Televisión Argentina, $2.840 millones a ACUMAR y $853,2 millones a Télam.
Las Transferencias Corrientes realizadas a empresas del Sector Industrial ascendieron a $35.836,7 millones, lo que significó una disminución del 49,8% y fueron destinadas, en su mayor parte, al Fondo Nacional de Desarrollo Productivo-FONDEP ($26.607,3 millones), al Fondo de Garantías Argentino FoGAr ($6.498,3 millones), a Fabricaciones Militares S.E. ($1.120,0 millones) y al Fondo Fiduciario para el Desarrollo de Capital Emprendedor FONDCE ($694,8 millones).
Según ASAP, “la fuerte disminución interanual en el monto de las transferencias corrientes al sector industrial obedeció a que la ejecución del Fondo de Garantías Argentino fue menor en $49.501,7 millones (-88,4%), con respecto al mismo período de 2020”.
Por su parte, las erogaciones para el financiamiento de gastos de capital de empresas públicas, fondos fiduciarios y sector privado tuvieron un incremento del 201%. En términos nominales, se ejecutaron $44.255,6 millones, destinados a Integración Energética, Administración de Infraestructuras Ferroviarias, Operador Ferroviario, Casa de Moneda, Agua y Saneamientos Argentinos y ACUMAR, entre otras.
Fuente:
https://www.ambito.com/economia/tarifas/los-subsidios-volvieron-subir-julio-y-ya-representan-seis-veces-el-deficit-primario-n5265829