La república de Panamá cuenta con leyes de incentivos fiscales exclusivas, para promover la construcción, operación y mantenimiento de centrales solares fotovoltaicas y calentadores solares de agua en techos de viviendas, comercios, industrias, escuelas, hospitales entre otros tipos de edificaciones.
El marco habilitante para acogerse a los incentivos mencionados, los otorga la Ley 37 de 2013 que establece el régimen de incentivos para el fomento de la construcción, operación y mantenimiento de centrales y/o instalaciones solares y su modificación mediante la Ley 38 de 2016, que adiciona otras disposiciones ampliando el alcance de los incentivos a aquellos que importen equipos para la venta.
Hacer más asequible la adquisición de los equipos necesarios para que los consumidores puedan producir su propia energía, permite que cada día se sumen más usuarios a la figura de autoconsumo, mejor conocida como techos solares, misma que hace posible que solo se pague en la factura eléctrica lo que se consume de la red y lo que producen los paneles solares sea consumido en el edificio donde estén instalados, lo cual, dependiendo de la cantidad de energía que los paneles solares fotovoltaicos puedan producir, la factura energética puede no cobrar ningún cargo por generación, y sólo incluir los costos por el uso de la red que distribuye la energía y los costos por la inversión inicial en la instalación que se recupera por los amplios ahorros al no pagar por la generación de energía con el sol.
Para poder gozar de los incentivos fiscales de la Ley 37 de 2013 y la Ley 38 de 2016, específicamente para proyectos de autoconsumo e importación para la comercialización de equipos, la Secretaría Nacional de Energía expide una certificación, cuyo trámite se realiza 100% de forma digital, lo que ha facilitado que en la actualidad más interesados apliquen para optar por los beneficios.
Certificaciones anuales
Durante los años 2015 y 2016 el ritmo promedio de certificaciones anuales rondaba las 95 y, entre los años 2017 al 2019 se incrementó a un promedio de 143 certificaciones por año; en el año 2020 aumentó a 178 certificaciones por año y el crecimiento más fuerte de aprovechamiento de los incentivos fiscales para la generación de energía solar se viene dando a partir del año 2021, ya que el ritmo de certificaciones emitidas ha crecido exponencialmente y supera la cifra promedio de 450 certificaciones anuales.
La Secretaría Nacional de Energía hoy día tramita cerca de 42 certificaciones mensuales, mismas que habilitan que todos aquellos que importen paneles solares fotovoltaicos, calentadores solares de agua, para la construcción de plantas solares o comercialización de estos equipos, incluyendo todas las partes necesarias para la construcción, operación y mantenimiento, puedan beneficiarse con los incentivos contemplados en la Ley 37 de 2013 y Ley 38 de 2016. A octubre de 2023, se ha brindado un incentivo fiscal acumulado de B/.11,611,779.00 del año 2014 al año 2023.
El crecimiento de clientes en uso de la figura de autoconsumo ha aumentado de 5 clientes que se mantenían en 2014, a 2,878 clientes en la actualidad, lo cual es un crecimiento exponencial. En el siguiente gráfico se puede visualizar el crecimiento de la cantidad de clientes dentro de la figura de autoconsumo.
Las leyes de incentivos en mención, la aprobación de la Estrategia Nacional de Generación Distribuida y la facilidad en los trámites para obtener la certificación, han sido instrumentos valiosos para el impulso de la generación solar fotovoltaica en techos, antes del año 2013 la capacidad instalada en autoconsumo no superaba los 35 kW y hoy día se cuenta con 91,798 kW de capacidad instalada de paneles solares fotovoltaicos en techo.
La siguiente imagen muestra el Histórico de la Capacidad Instalada de Paneles Solares Fotovoltaicos al mes de octubre del 2023 y la cantidad de instalaciones por tarifa y distribuidora de energía eléctrica.
La Estrategia Nacional de Generación Distribuida, aprobada mediante Resolución de Consejo de Gabinete N°.5 del mes de enero del año 2022, promoviendo metas de capacidad instalada de 950 MW y 1700 MW en los escenarios conservador y optimista respectivamente.
Para avanzar en dichas metas la misma Resolución crea la Comisión Interinstitucional de Generación Distribuida conformada por entidades del Estado e interesados en participar del sector privado, quienes trabajan para mejorar en aspectos legales, normativos y regulatorios, Innovación Tecnológica y Modelos de Negocios, Educación, I+D+i y Fortalecimiento Institucional.
En este sentido promover la democratización de la energía lleva al empoderamiento de los usuarios de la red de distribución de energía eléctrica, para que tomen un rol más participativo y puedan producir para sus necesidades de energía eléctrica, y que en un futuro puedan realizar la compraventa de su potencia y energía, será necesario evaluar cambios normativos y regulatorios.
Como parte de esta estrategia la SNE, junto a la AIG y el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo, se desarrolla una plataforma digital para que todos los procesos de trámites para permisos de instalación de los sistemas solares fotovoltaicos se puedan llevar a cabo virtualmente.
Para que el consumidor final pueda disminuir el gasto en electricidad, es importante que implemente el uso de tecnologías verdes como la energía solar en residencias, comercios, sector agropecuario e industrial, de la mano con tecnologías de uso de energía eficientes dentro de las edificaciones, lo cual además de descarbonizar la matriz eléctrica y mitigar el efecto del cambio climático, reduce el costo de la factura eléctrica, cuyo impacto se percibe una vez se amortice la inversión en los paneles solares fotovoltaicos.
Asimismo, ha aumentado la cantidad de bancos del país que ofrecen financiamiento diferenciado con mejores condiciones, para adquirir paneles solares fotovoltaicos, figura con la que hace unos años no se contaba.
La entrada Panamá emite unas 450 certificaciones anuales por incentivos fiscales en fomento de la Energía Solar se publicó primero en Energía Estratégica.