Nanik Singh, presidente de Potencia Verde, remarcó los desafíos y posibilidades que tiene Panamá para desarrollar y producir hidrógeno a partir de fuentes renovables, puntualizando mediante la generación eólica.
“No tenemos específicamente una estrategia hacia el hidrógeno, como Chile o Costa Rica, pero sí, como también parte de la Comisión de Energía y Agua del Sindicato de Industriales de Panamá, hemos considerado que nos estamos durmiendo al respecto”.
Y continuó: “El país tiene una posición óptima y, aunque tal vez no logremos convertirnos en un productor con precios super competitivos como otros países, tenemos la posición geográfica, la posibilidad de transformarse un hub de hidrógeno verde, por ejemplo para suministro de amonio a naves que pasan por el canal”.
Esas palabras por parte del especialista se basan en la idea que ve un potencial para el desarrollo del vector energético tanto en Panamá como en la región en general, y también con la mira puesta en los diferentes compromisos internacionales y la lucha frente al cambio climático.
Siguiendo esa misma línea, Singh sostuvo que “Panamá tiene el esquema de renovables, canal y puertos, e incluso movilidad eléctrica, para incorporar el hidrógeno”.
Y agregó la importancia de impulsar las contribuciones determinadas a nivel nacional (NDC) en países como Panamá, independientemente del H2: “Se necesita de manera más contundente hacia la incorporación de renovables y, todo el conjunto, nos permitirá desarrollar en la región y volvernos un grupo fuerte en dicho vector energético”.
Por otro lado, ya focalizando en la sinergía entre producción de hidrógeno y energía eólica, el presidente de Potencia Verde manifestó que “dentro de poco tiempo se alcanzarán aproximadamente 350 MW de capacidad eólica instalada”, pero hizo hincapié en la falta de algunas cuestiones para su desarrollo.
“Aunque existen múltiples leyes que permiten incentivos, exoneraciones, créditos fiscales, no hay acciones que incentiven el tema eólico a nivel concreto. Es decir que no tenemos cuotas de participación particular o metas”.
“La consideración de la potencia firme para generación eólica incluso está afectando la actual reserva de confiabilidad de la demanda, ya que se sobreestiman, en algunos meses donde la eólica está presente en Panamá, lo que al final hace es que cueste más el suministro a muchos clientes, especialmente a los grandes”.
“Y aunque en la última licitación de corto plazo se permitió ofrecer energía en bloques, lo que es bueno para tecnologías intermitentes, las licitaciones en general en Panamá dicen mucho, ya que en eólica sólo tuvimos dos licitaciones, una en 2011 y en 2013”, agregó.
Frente a dichos acontecimientos, expresó la “necesidad” ciertos aspectos tales como “los esquemas por los cuales se otorgan las licencias, por los que se hacen las licitaciones para que se cumplan los tiempos”, además de “establecer normas claras para manejar la posición dominante de los agentes del mercado».