Tiempo atrás Energía Estratégica te contó que el Centro Nacional de Control de Energía (CENACE) había actualizado el Pronóstico de Disponibilidad de Generación en el cual se detallaba la capacidad que podría instalarse en los próximos veinticuatro meses en el Sistema Interconectado Nacional (ver enlace).

Ante ello, expertos de la organización Admonitor, la cual busca brindar transparencia al Mercado Eléctrico Mayorista (MEM), dialogaron con Energía Estratégica y analizaron los números del pronóstico del CENACE y el panorama venidero de las renovables en el país. 

¿Cómo se podría considerar esto ese Pronóstico de Disponibilidad de Generación? ¿Y por qué sólo se llegaría a ese número?

El pronóstico de 3,867 MW de entrada de capacidad total para 2022 en el SIN es una cifra menor en comparación con años previos; en 2019, dicha cifra fue de 8,365 MW (55 Unidades de Central Eléctrica nuevas), es decir, 116% mayor que la previsión para 2022. Y cabe señalar que el 53.9% de la previsión de entrada de capacidad entrante en 2022 corresponde a capacidad renovable (eólica y fotovoltaica).

Además que las implementaciones institucionales están limitando la entrada de capacidad de generación de todas las tecnologías y, por ende, también la de las renovables. 

Lo explicado se debió a que la cuarta Subasta de Largo Plazo (SLP) se canceló, no obstante, las SLP eran el principal instrumento en el cual el SIN incrementaba su capacidad de generación y, a su vez, dicha integración tenía diversos incentivos para que la integración fuese con tecnologías renovables en mayor medida.

¿Creen que se podría aumentar más tal capacidad renovable?

Cualquier valor de la cantidad de generación renovable que pueda soportar un sistema es incierto, debido a que la naturaleza de los sistemas eléctricos de potencia es distinta entre cada uno de ellos; sin embargo, existe evidencia de distintos casos de estudio en que los sistemas han soportado valores cercanos al 55% de generación renovable instantánea con respecto a la demanda, tal como es el caso de Irlanda (Gráfica 1).

Gráfica 1. Ejemplo de niveles altos de energía intermitente: caso de estudio Irlanda. (Fuente: https://www.nrel.gov/docs/fy17osti/68349.pdf)

Las condiciones para alcanzar dicho valor involucran la instalación de tecnología de punta, el pleno cumplimiento al Código de Red de los sistemas, así como criterios más estrictos para la interconexión de centrales eléctricas. 

Otros sistemas en el mundo han instalado sistemas de almacenamiento y otros dispositivos que coadyuvan para garantizar la confiabilidad del sistema, tales como volantes de inercia, condensadores síncronos y dispositivos emuladores de inercia.

Considerado lo anterior, en el SIN, se ha alcanzado el 26% de generación renovable instantánea sobre la demanda, por lo que existe la oportunidad de mejorar las tecnologías instaladas en el sistema, así como de incrementar la capacidad instalada de generación renovable.

¿Es factible pensar en que el rumbo energético cambie y se mejoren tales pronósticos?

Los escenarios de planeación para diversificar la matriz energética deben ser diseñados integralmente en cuanto a los rubros técnicos y la propia política energética, por lo tanto, siempre se puede buscar un adecuado equilibrio de la matriz energética para satisfacer la demanda, cumpliendo con la seguridad y confiabilidad del sistema. 

Generalizar el incremento de capacidad renovable en el SIN puede proporcionar resultados inciertos, dado que las propiedades eléctricas, físicas y geográficas de cada región dentro del sistema son diferentes. 

Mientras que algunas regiones pueden soportar el incremento de generación eólica o fotovoltaica sin necesidad de añadir nuevos dispositivos o refuerzos a la red, hay algunas otras regiones que necesitarán de recursos adicionales. 

Y todo lo anterior debe estar regido bajo una política energética que esclarezca la regulación, así como estudios de índole técnica que brinden transparencia en cómo participar de forma segura y confiable en el sistema y en el Mercado Eléctrico Mayorista.