La Asociación Latinoamericana de Distribuidoras de Energía Eléctrica (ADELAT) participó de una sesión plenaria en la VII Semana de la Energía enfocada a abordar el panorama de «transiciones energéticas y renovables» en la región.

Ramón Castañeda, presidente de la ADELAT, fue quien asistió al evento organizado por la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Allí, planteó la necesidad de realizar un análisis integral de la transición o transiciones para prever próximos pasos que permitan el despliegue sostenible de una mayor generación renovable en la región.

Y es que, en palabras de Ramón Castañeda, “no es suficiente con aumentar la capacidad de generación”. 

Desde la perspectiva del referente empresario la electrificación de cada vez más actividades trae consigo retos importantes para la reforzar la infraestructura y mejorar la gestión no sólo de la generación sino también de los consumos.

“Vamos a ser cada vez más dependientes de la energía eléctrica. Por lo tanto, la resiliencia de las redes de distribución en 20 o 30 años más tiene que ser mucho mayor que la que tenemos hoy. El desafío es doble”, apuntó Castañeda.

Y continuó: “es mejorar, modernizar y reforzar las redes de distribución, pero a su vez hacerlas más resilientes porque vamos a depender mucho más de la energía eléctrica de lo que lo hacemos hoy”.

Siguiendo con el análisis de Castañeda, aquello significaría “más que duplicar la capacidad de las redes de distribución de energía eléctrica” al 2050. Sin duda, un desafío que lo están observando con atención tanto desde el sector privado como público.

“Solamente las empresas que están hoy en ADELAT tienen 70 millones de medidores de electricidad y cambiarlos o incorporar tecnología digital para controlar el consumo de 70 millones de termostatos u otras aplicaciones de domótica en las casas es un proceso que va a tomar bastante tiempo. La buena noticia es que ya comenzó”.

En relación a las herramientas que abren oportunidades para enfrentar esos desafíos, ADELAT sostiene como pilares fundamentales a la digitalización y a la gestión con eficiencia.

“La digitalización será clave para este proceso porque nos va a permitir que el proceso de inversión en el reforzamiento de las redes de distribución sea más efectivo”.

Y concluyó: “la gestión del consumo puede tener un rol muy importante, no solo por la eficiencia económica para las personas en sus casas, no sino también por la eficiencia económica del sistema en su conjunto”.