TotalEnergies cerró 2023 con un beneficio neto atribuido de US$ 21.384 millones, registrando así una mejora del 4,2% en comparación con 2022, y subió un 7,1% el dividendo.

Entre octubre y diciembre, el grupo obtuvo un beneficio neto atribuido de US$ 5.063 millones , lo que representa un incremento del 55% en relación al mismo periodo de 2022, después de un efecto positivo extraordinario de 180 millones en contraste con el impacto negativo de atípicos por valor de 5.585 millones en el último trimestre de 2022.

Los ingresos de la compañía en el conjunto del ejercicio anterior disminuyeron un 15,6% anual, hasta US$ 237.128 millones, incluyendo una caída del 13,6% del negocio en el cuarto trimestre, hasta 59.237 millones.

“En un entorno incierto, la estrategia de transición equilibrada de TotalEnergies, que combina el crecimiento en petróleo y gas, en particular en GNL, y energía integrada, arrojó sólidos resultados en 2023, en línea con los objetivos”, declaró el CEO de TotalEnergies, Patrick Pouyanné.

Asimismo, el ejecutivo anunció que, ante el crecimiento estructural del flujo de caja y las recompras de acciones ejecutadas en 2023, el consejo de administración propondrá en la junta general de accionistas del 24 de mayo el reparto de un dividendo complementario de 0,79 euros por acción, incrementando así un 7,1% el dividendo ordinario de 2023, hasta 3,01 euros por acción.

Además, destacó que el consejo de administración ha confirmado una política de retorno para los accionistas en 2024, que combinará un aumento de los dividendos a cuenta del 6,8% hasta 0,79 euros/acción y US$ 2.000 millones de recompra de acciones en el primer trimestre de 2024.