Paolo Rocca, presidente del Grupo Techint, sostuvo que “en Argentina hay elementos que están contrastando en la agenda del gobierno, como es la reducción del peso del Estado, la cancelación del déficit fiscal, la reducción de las regulaciones de la economía”, al tiempo que puntualizó “que es necesario que el Gobierno abra el cepo para que lleguen inversiones a la Argentina”.
Rocca habló en el marco del Alacero Summit 2024, que se realiza en el hotel Hilton de Puerto Madero, trazó un panorama de la industria del acero en el país y en la región, cuestionó el impacto que tienen en la industria las importaciones de China y dijo que si bien “ayudan a controlar la inflación, tienen un poder destructivo sobre la actividad industrial”.
“No es una democracia, sino un régimen autoritario”, argumentó sobre China y cuestionó a ése país “por vender sus productos por debajo del costo de la producción”.
La advertencia ocurre en momentos en que el gobierno de Javier Milei parece estar revisando su posición original respecto de las relaciones con China, a cuyo gobierno cuestionó duramente. De hecho, estaría programando un viaje a ése país para enero próximo.
Alacero, es una asociación que reúne a las mayores empresas del sector en Occidente. “Tiene que jugar un rol relevante en promover una agenda industrial para nuestros paises, y sostener acciones para fortalecer la competitividad de nuestra industria y su acceso a los mercados mundiales”, refirió.
Rocca sostuvo que “mirando hacia el futuro, creo que la agenda de la industria siderúrgica en América Latina debería contemplar:
.El diálogo y la formación de una alianza entre todos los eslabones de nuestras cadenas de valor, para crear oportunidades para la iniciativa privada y reducir el peso del Estado en la economía; liberar capacidades creativas y emprendedoras; reducir la carga tributaria; promover la disciplina fiscal; y cualquier otra medida que fortalezca el potencial exportador, reduzca la carga tributaria sobre el trabajo y mejore la infraestructura esencial.
•La promoción de una inserción internacional que aliente el reposicionamiento de las cadenas de valor en dirección a un Occidente, un mundo con el cual compartimos valores y principios, y con el cual nos sentimos en condiciones de competir y poder construir una integración eficiente, que permita la incorporación de tecnología e innovación. “La industria siderúrgica de nuestros países puede competir sin duda con los bloques económicos del mundo occidental (Europa, USMCA y Japón). Con China no podemos hacerlo porque la cancha de juego no está nivelada”, sostuvo Rocca.
. La descarbonización gradual de nuestra matriz productiva, aprovechando las extraordinarias ventajas competitivas que tenemos para alcanzar una matriz energética sustentable a largo plazo.
“En America Latina, tenemos recursos hídricos y eólicos, además de un extraordinario potencial para integrar el sistema energético, aprovechar las reservas de Vaca Muerta, del Pre-Sal, del America del Norte y poder lograr un costo de energía absolutamente competitivo en escala global. Es una transformación inevitablemente gradual, pero que puede ser realizada con nuestros propios recursos, en la medida en que podemos crecer y expandir nuestro alcance global”, remarcó.