Durante 2021 el EBITDA (ganancias antes de intereses, impuestos y amortización) ajustado de la compañía YPF alcanzó los 3.839 millones de dólares, más que duplicando la rentabilidad de 2020 y un 6 % superior a los niveles prepandemia de 2019.
Un informe de la energética de mayoría accionaria estatal detalló que “el margen sobre ventas fue del 29 %, el más alto de los últimos 5 años”. YPF obtuvo en el cuarto trimestre una ganancia neta de 24.730 millones de pesos que, sumado a los resultados positivos del tercer trimestre, le permitieron recuperar prácticamente la totalidad de las pérdidas netas acumuladas en el primer semestre del año.
La compañía logró cumplir con la ejecución de su plan de inversiones por 2.700 millones de dólares anunciado a comienzos del año pasado, que resulta un 70 % superior respecto al año anterior y constituye la mayor inversión corporativa del país. En particular, en el cuarto trimestre la compañía invirtió 908 millones de dólares, un 30 % superior respecto al trimestre anterior.
“La producción total de hidrocarburos se mantuvo estable por primera vez luego de 5 años de caídas consecutivas. El trabajo que se realizó durante el año para optimizar la producción permitió cerrar el último trimestre con un incremento de casi 9 % en petróleo y 12 % en gas respecto de igual período en 2020”, destacó.
La actividad no convencional continuó mostrando excelentes resultados y actualmente representa más de un tercio de la producción consolidada de la compañía. La producción de crudo no convencional mostró un crecimiento del 62 % en el último trimestre respecto a igual trimestre del año anterior, mientras que la producción de gas no convencional se duplicó en el mismo período.
Además, en 2021 se completó el mayor número de pozos horizontales desde que comenzó el desarrollo de Vaca Muerta hace 10 años. “Las inversiones, los resultados obtenidos y la eficiencia lograda durante el 2021, le permitieron a YPF mejorar sustancialmente sus reservas que superaron los 1.100 millones de barriles de petróleo equivalentes, la mayor cifra en cinco años y un 24 % superior al año anterior”, señaló el informe.
El índice de reemplazo de reservas se ubicó en 229 %, la marca histórica más alta registrada en los últimos 20 años. Por el lado del Downstream, las ventas domésticas de combustibles consolidaron una recuperación anual mejor a lo esperada. En el cuatro trimestre del 2021, las ventas fueron superiores en un 7 % aproximadamente respecto a la etapa prepandemia. Los niveles de procesamiento en las refinerías se recuperaron a lo largo del año, alcanzando una tasa de utilización del 84,7 % en el último trimestre del año.
En materia financiera, el flujo de caja libre fue positivo por séptimo trimestre consecutivo, acumulando 882 millones de dólares en el año, lo que permitió disminuir la deuda neta de la compañía que se ubicó en el nivel más bajo desde 2015 y alcanzó un ratio de endeudamiento neto saludable de 1,6 veces en relación con el EBITDA ajustado.
Para el año 2022, YPF tiene planificado invertir 3.700 millones de dólares, lo que representa un incremento de más del 40 % en comparación al año 2021. El plan de inversiones estará focalizado nuevamente en el Upstream, que concentrará una inversión de 2.800 millones de dólares. Dentro de ese valor, 1.600 millones serán destinados específicamente al desarrollo de la actividad no convencional.
Además, la compañía planifica invertir 700 millones de dólares en el Downstream, principalmente en las obras para readecuar las refinerías a las nuevas especificaciones de combustibles bajando el contenido de azufre y proyectos destinados a la evacuación del crudo de Vaca Muerta.
“Como resultado de este ambicioso plan de inversiones, la compañía estima aumentar la producción anual de hidrocarburos un 8 % en comparación a 2021, lo que significará el mayor crecimiento orgánico de los últimos 25 años”.
Dicho crecimiento se apalanca en gran medida por el fuerte impuso de la producción en Vaca Muerta, que crecerá más del 40 % en el año, destacó YPF.