Las operaciones en el pozo Remanso-X1 (RMS-X1), realizadas recientemente por Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), permitirán catalogar al pozo como descubridor de un nuevo campo en el área Okinawa, resultado de la campaña de adquisición de datos realizada con tecnología de punta en campos maduros y cerrados.

El nuevo reservorio generará aproximadamente U$S 5.000 millones en gas al país. Además, contribuirá a un ahorro en la compra de combustibles en U$S 1.000 millones.
“El pozo se encuentra en pruebas de producción de condensado (de 48° API). Estos resultados permitirán catalogarlo como descubridor de un nuevo campo hidrocarburífero con recursos estimados en 0,7 trillones de pies cúbicos de gas y 52 millones de barriles de líquidos”, destacó este domingo el presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Luis Alberto Arce Catacora, durante su mensaje por el 198 aniversario de la fundación de Bolivia.
El pozo descubridor del nuevo hallazgo petrolero en la estructura geológica de Remanso, se localiza en la zona de la Llanura Chaco-Beniana, en los niveles de la formación Los Monos. Los recursos de hidrocarburos en el área Remanso se estiman en 0,7 trillones de pies cúbicos de gas y 52 millones de barriles de líquidos.

“Estaríamos ante la presencia de un nuevo campo en Bolivia, este descubrimiento nos abre un nuevo horizonte de desarrollo a corto y mediano plazo, lo que posibilitará incorporar reservas e incrementar la producción de líquidos y así, reducir importaciones de carburantes bajo la línea de la sustitución de importaciones”, manifestó el presidente de YPFB, Armin Dorgathen Tapia.

El 7 de julio pasado se iniciaron las operaciones en el área de contrato Okinawa, ubicada en la provincia Warnes del departamento de Santa Cruz. Las actividades incluyeron el mantenimiento de caminos para ingresar a la planchada y acceder al pozo RMS-X1, así como también la habilitación operativa del cabezal de producción y la toma de registros con el fin de evaluar la integridad del pozo.

Técnicos de la estatal petrolera encontraron indicios positivos de presencia de hidrocarburos con condiciones originales. Ante este escenario, se movilizaron equipos para evaluar el potencial productivo del pozo RMS-X1. Desde el 1 de agosto se realizan pruebas de producción con resultados positivos, registrando una producción de condensado de 45 barriles por día en las areniscas de la formación Los Monos.
Se han tomado muestras para evaluar si el descubrimiento es un gas condensado o un petróleo volátil, los resultados de las pruebas están permitiendo estimar la productividad, caracterizar el reservorio y cuantificar volúmenes producidos.
El pozo RMS-X1 fue perforado en 1984 con equipo de YPFB y atravesó la estructura de Remanso, el pozo fue cerrado y en el marco del Plan de Reactivación del Upstream se realizaron operaciones en la presente gestión.

RESULTADOS EXITOSOS CON YARARÁ-X2

Asimismo, el presidente de Bolivia indicó que el pozo Yarará-X2 atravesó la arena Petaca con resultados exitosos y se confirmó la continuidad del reservorio y la acumulación comercial del campo Yarará de aproximadamente 1 millón de barriles de petróleo.
“El pozo Yarará-X2, actualmente en pruebas de producción, incrementará la producción de petróleo en el campo en más de 700 barriles diarios para el país gracias al campo Yarará”, añadió Arce.

REACTIVACIÓN DE CAMPOS MADUROS Y CERRADOS

Las actividades en el pozo Remanso-X1 se realizan en el marco de la primera campaña de intervenciones en 29 pozos seleccionados del portafolio de campos maduros o cerrados, con oportunidades de reactivación de producción.

El proyecto “Servicio de adquisición de datos en campos maduros”, se enmarca en los objetivos estratégicos de YPFB y el Plan de Reactivación del Upstream, con la finalidad de llevar adelante una reevaluación técnico-económica de cada uno de los proyectos en campos maduros o cerrados que permitan reactivar pozos de petróleo y gas en un escenario de complejidad geológica y heterogeneidad de los yacimientos de petróleo en un campo maduro.

Las oportunidades en desarrollo están enfocadas en la reactivación de campos maduros o cerrados productores de líquidos y gas. Con el presente proyecto, la estatal petrolera busca reducir el déficit en la importación de líquidos en línea con el Plan de Sustitución de Combustibles.